La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) es una enfermedad crónica inflamatoria de los pulmones que obstruye el flujo de aire desde los pulmones. Los síntomas incluyen dificultad para respirar, tos, producción de mucosidad y silbido al respirar. De acuerdo a los datos ofrecidos por la Asociación de Pacientes con EPOC (Apepoc), esta se erige como la tercera causa de muerte en el mundo y la cuarta en el caso de España.
Según los últimos estudios,el 11,8% de la población de entre 40 y 80 años padece EPOC, aunque recientes investigaciones arrojan un preocupante dato: la enfermedad está afectando a pacientes cada vez más jóvenes. Si bien es cierto que en la actualidad afecta más a hombres que a mujeres, se espera que el porcentaje se iguale, puesto que la tendencia de pacientes mujeres con la enfermedad es creciente. La pandemia provocada por el SARS-CoV-2 ha posicionado a estos pacientes como uno de los principales grupos de riesgo y su vida ha cambiado por completo desde la aparición de los primeros casos de Covid-19.
De acuerdo al estudio publicado el pasado mes de septiembre desarrollado por Apepoc y la Sociedad Madrileña de Neumología y Cirugía Torácica (Neumomadrid), el 73,3% de los pacientes con EPOC considera que su enfermedad ha empeorado durante la pandemia. La crisis sanitaria vivida durante el último año y medio solo ha acrecentado algunas de las principales demandas que los pacientes con EPOC reclaman al Ministerio de Sanidad desde hace ya demasiado tiempo.
Motivo por el que este 17 de noviembre, Día Mundial de la EPOC, ponemos el foco en las más importantes de acuerdo a la información ofrecida por Apepoc.
- Retomar las revisiones, priorizando la atención de los pacientes que requieren un diagnóstico precoz y la de los pacientes con mayor fragilidad.
- La teleconsulta como modelo complementario para dar apoyo a la asistencia presencial.
- Retomar la realización de la espirometría en los Centros de Salud.
- Promover programas de rehabilitación respiratoria en el ámbito comunitario.
- Promover programas estructurados de automanejado de la enfermedad.
- Reforzar la atención a la salud mental para los pacientes.
Retomando el referido estudio vemos que la pandemia ha golpeado duramente a los pacientes con EPOC. El 83% declara sentirse deprimido y sin ganas de hacer nada lo que tiene consecuencias negativas en todos los ámbitos de su vida. Esto puede traducirse en una menor adherencia al tratamiento, menos actividad física, peor alimentación e incluso volver al tabaquismo.
El 80,9% de los pacientes participantes en este estudio refirió dificultades a la hora de acceder a centros sanitarios durante la pandemia. El 84% ha realizado consultas no presenciales, aunque solo el 30% prefiere este modelo de consulta. Un 20% aboga porque se mantenga una vez haya acabado la pandemia.
El 73,3% de los pacientes con EPOC considera que su enfermedad ha empeorado durante la pandemia
Según los datos del referido estudio, el 82% de los participantes ha visto incrementada la preocupación relativa a su salud respiratoria. Se ha observado que en los pacientes de 65 años y de más edad y en las mujeres el impacto en los factores funcionales y emocionales ha sido mayor.
PROPUESTAS PARA MEJORAR EL ABORDAJE DE PACIENTES CON EPOC
El estudio “Impacto clínico, asistencial, económico y social de la mejora del abordaje de la EPOC”, liderado por la Fundación Weber y que ha contado con la participación de Apepoc, recoge un total de 15 propuestas para la mejora del abordaje de la EPOC dentro del SNS.
- Disponibilidad de espirometría en Atención Primaria y formación para su realización e interpretación.
- Formación sobre la EPOC dirigida a profesionales de Atención Primaria.
- Informar a pacientes y familiares sobre la enfermedad y los tratamientos.
- Consensuar el tratamiento y manejo de la enfermedad con el paciente y el cuidador.
- Establecer programas coordinados entre Atención PrimariaEspecializada y otros centros-residencias para facilitar el manejo integral de la persona con EPOC.
- Fomentar el uso y la identificación de pacientes incluidos en estrategias de cronicidad mediante una historia clínica compatible entre Atención Primaria y Especializada.
- Formación en adherencia terapéutica.
- Continuidad asistencial tras una exacerbación, en coordinación con Atención Primaria.
- Disponer de los recursos adecuados en exacerbaciones que requieran hospitalización.
- Conciliar y explicar al paciente la medicación en el momento del alta hospitalaria.
- Plan de deshabituación tabáquica en personas fumadoras con EPOC.
- Valoración social del paciente desde un punto de vista multidimensional.
- Fomentar la aplicación de los principios bioéticos: informar al paciente y el cuidador para facilitar su participación en la toma de decisiones.
- Plan de manejo de tratamiento paliativo farmacológico y no farmacológico del paciente terminal.
- Fomentar la formación de los profesionales en el manejo específico del paciente paliativo respiratorio, especialmente en fases avanzada y/o terminal.