Una vez concluida la adjudicación ordinaria de las plazas MIR de este 2023 toca analizar los resultados de las distintas especialidades y, aunque algunas han dado la sorpresa por el lado positivo, Bioquímica Clínica ha sido la última en estrenarse, aunque ha logrado asignar todas sus vacantes. "Nos da lástima el que se coja nuestra rama con número tan altos. No porque el 7.610 vaya a ser un mal médico, ni mucho menos, sino porque se traduce un poco en falta de interés", reflexiona el presidente de la Sociedad Española de Medicina de Laboratorio (SEQC), Antonio Buño.
La razón la encuentran, en parte, en ser una especialidad compartida por varias formaciones (ya que se puede acceder a ella desde distintas titulaciones). Asimismo, no es una rama muy conocida, por lo que reconoce que "mientras el currículo siga así, esto es lo que nos espera". Con ello hace referencia a que, durante la carrera, no se enseña realmente lo que un médico puede hacer en un laboratorio, por lo que aboga por centrar más la formación en la parte de Bioquímica no tanto general, como se da al principio del grado, como clínica. Sin embargo, también Buño se muestra autocrítico: "No terminamos de dar a conocer correctamente lo que se hace dentro del hospital y hay que hacerlo".
Del mismo modo, reconoce ser consciente de que no son la rama que más llame la atención de los médicos, que en muchas ocasiones sienten que no se están desarrollando en su profesión porque que no tienen trato directo con el paciente. "Para alguien que no le guste mucho el trato humano directo, es una especialidad magnífica", afirma contundente, y añade: "Tiene un contenido que va mucho más allá de la Medicina. Hay que saber algo de Física, de Química, de ciencias básicas de laboratorio... Para mí eso es una ventaja, por que te amplía el conocimiento".
"Nos da lástima el que se coja nuestra rama con número tan altos. No porque el 7.610 vaya a ser un mal médico, ni mucho menos, sino porque se traduce un poco en falta de interés"
Se trata, además, de una rama que "está en contacto con todas las especialidades" y, por tanto, es "muy abierta". Del mismo modo, al haber profesionales de otras formaciones, se aportan distintos puntos de vista: "La multilicenciatura es una riqueza".
Ante todo, lo que reclaman es un "replantamiento" por parte del Ministerio y volver a poner el foco en una de sus mayores reivindicaciones, su unión con Análisis Clínicos: "En esa fusión estamos de acuerdo las dos comisiones nacionales de las especialidades de Análisis y Bioquímica, todos los interlocutores con los que hemos hablado". De hecho, ya estuvieron a punto de conseguirlo con el antiguo Real Decreto de Troncalidad de 2014: "En ese documento se contemplaba así y durante un año y pico llegó a estar creada una comisión con el objetivo de fusionaras y convertir ambas en una sola, 'Análisis Clínicos y Bioquímica'".
"Vemos al Ministerio bastante maduro para que pueda llevar a cabo esta fusión", concluye el presidente de SEQC, que desea que con esta reordenación también se pueda potenciar el conocimiento de los estudiantes de Medicina de la especialidad.