Lilly continúa con los recortes para agilizar el negocio… Ahora, la farmacéutica ha logrado que un total de 2.300 empleados hayan anticipado su jubilación.
Y es que tal y como explicamos en ECSalud.com, la farmacéutica anunció hace unos días que llevaría a cabo una reducción de plantilla que afectará al 8% de sus empleados en todo el mundo, lo que equivale a 3.500 puestos de trabajo.
Ahora, Lilly está en camino de llegar su objetivo y prescindir de 3.500 empleados para, según la compañía, “racionalizar las operaciones y concentrar más eficazmente los recursos en el desarrollo de nuevos medicamentos, así como mejorar su estructura de costes”.
Según ha detallado un portavoz de la farmacéutica, más allá de las 2.300 jubilaciones anticipadas, "la compañía determinará dónde necesita reducir aún más los costes y mejorar la eficiencia”. "Las posiciones restantes vendrán de otras reducciones anticipadas de la fuerza de trabajo, incluido el cierre selectivo de los sitios, así como la consolidación de algunos trabajos en los centros de servicios compartidos existentes", ha asegurado el portavoz.
Más allá de las 2.300 jubilaciones anticipadas, la compañía determinará dónde necesita reducir aún más los costes y mejorar la eficiencia
Asimismo, anteriormente la compañía ya anunció que cerraría la oficina de investigación en Bridgewater (Nueva Jersey) y el Centro de Investigación y Desarrollo de Lilly China, en Shanghai, así como que trasladaría la producción de su planta de fabricación de Larchwood a una planta ya existente en Fort Dodge.
Estos son los primero movimientos asociados a la reestructuración de David Ricks, nuevo CEO de Lilly, en un momento en el que la compañía se enfrente a una presión muy alta en su negocio de la diabetes.
Cabe recordar, que antes del anuncio de los recortes de empleo, Ricks sacudió al equipo administrativo de la farmacéutica con la incorporación de Christi Shaw, exejecutiva de Novartis, y el nombramiento de Enrique Conterno como jefe de Lilly en Estados Unidos.