Las enfermedadescardiovasculares representan la primera causa de muerte en España. Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre defunciones según la causa de muerte, relativos al año 2020, estas patologías provocaron aproximadamente 125.000 muertes. De todas ellas, sobresalen las enfermedades isquémicas, con casi 30.000 fallecidos.
Teniendo en cuenta estas cifras, y con motivo de la celebración del Día Mundial del Corazón este jueves, 29 de septiembre, en ConSalud.es analizamos cuáles son las principales estrategias que están en vigor y que tratan de proteger la salud cardiovascular de la población. De forma especial, nos centramos en aquellas dirigidas a las mujeres, debido a que ellas fallecen por esta causa en un porcentaje más alto.
La Estrategia incide en que estas patologías en el género femenino estaban “poco estudiadas, poco reconocidas, infradiagnosticadas y poco tratadas”
Para ello tomamos como referencia la Estrategia en Salud Cardiovascular del Sistema Nacional de Salud (ESCAV), documento recientemente aprobado por el Consejo Interterritorial y consensuado tras varios meses de trabajo entre pacientes, sociedades científicas, profesionales sanitarios, investigadores y representantes del Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas.
La principal característica de esta Estrategia es que pretende actuar sobre los principales factores de riesgo que predisponen a la población a desarrollar estas enfermedades. Hablamos de determinantes individuales y sociales como el bajo nivel socioeconómico o la cuestión de género; factores del entorno como la calidad del aire; factores relacionados con el estilo de vida, como el tabaquismo; o factores biológicos, como la hipertensión, el sobrepeso y la obesidad o la diabetes mellitus.
Con estos fines, y pese a que está organizado en siete ejes vertebradores de actuaciones específicas, el texto pone el foco en cuatropatologíasconcretas debido a su “relevancia e impacto”: la cardiopatía isquémica, la insuficiencia cardíaca, las valvulopatías y las arritmias. Con todo, han definido un total de 130 acciones con el fin de “mejorar la salud cardiovascular de la ciudadanía”.
CONTRA LA DESIGUALDAD DE GÉNERO
En el documento, se subraya el hecho de que la prevalencia de las enfermedades cardiovasculares en España en 2019 afectaba en su mayoría a las mujeres (52,6%), provocando 8.000 muertes más que en los hombres. Por otro lado, se incidía en que estas patologías en el género femenino estaban “poco estudiadas, poco reconocidas, infradiagnosticadas y poco tratadas” y que las mujeres tenían un menorconocimiento de los signos y síntomas de estas enfermedades.
El plan contempla intervenir para “trabajar con las mujeres y niñas sobre la importancia del cuidado de la propia salud" y desarrollar protocolos de prevención precoz
Por todo ello, la Estrategia en Salud Cardiovascular contempla diversas actuaciones para atajar estas desigualdades de género. Por ejemplo, abogan por “evidenciar el impacto de las diferencias de sexo y los sesgos de género en la atención sanitaria”, para a continuación intervenir para “trabajar con las mujeres y niñas sobre la importancia del cuidado de la propia salud, y junto con los hombres, la necesidad de compartir las cargas del cuidado de otros”.
En esta misma línea, el plan plantea desarrollar “protocolos de prevención precoz en mujeres” para la hipertensión arterial, la diabetes gestacional, la diabetes, la dislipemia, la obesidad o el sedentarismo. Además, se promoverá el uso “de forma equitativa” de terapias en ambos sexos que aborden el síndrome coronario agudo, la insuficiencia cardiaca o las arritmias y la formación a los sanitarios sobre aspectos concretos de diagnóstico y tratamiento en la mujer.
COTO AL ALCOHOL, AL TABACO Y A LA MALA ALIMENTACIÓN
Al margen de la cuestión de género, el documento recoge otras medidas relevantes relacionadas con la promoción de la salud y la prevención de la enfermedad. Por ejemplo, plantean un mejor acceso a productossaludables para personas “en posición económica desfavorable” o el fomento del transporte saludable como “caminar e ir en bicicleta” mediante el desarrollo de “zonas de tráfico restringido y zonas pacificadas de las ciudades”.
En el ámbito de la alimentación, proponen instalar fuentes de agua en instituciones públicas y “centros educativos, sanitarios y deportivos”, así como regular la oferta de las cafeterías y las máquinas expendedoras para que “mayoritariamente” ofrezcan “productos saludables y bebidas libres de alcohol”. También los bares y establecimientos de restauración estarán obligados a dar agua del grifo “por defecto en los menús” y se buscará “colaborar” con ellos para que promuevan “la dietamediterránea como modelo de alimentación cardiosaludable”.
Las autoridades proponen un mejor acceso a productos saludables, facilitar el acceso de los fumadores "a los programas de cesación tabáquica" y un mapa con indicadores de salud
En cuanto al consumo de tabaco, el documento contempla medidas ya previstas como la ampliación de los espacios libres de humo y la promoción de hogares donde no se consuma tabaco. De igual modo, se prevé facilitar el acceso “homogéneo” de los fumadores “a los programas de cesación tabáquica” y equiparar la regulación actual “a los productos novedosos de tabaco”.
EDUCACIÓN, RRSS Y MAPA DE INDICADORES
Otro de los puntos clave de la Estrategia es el relacionado con la difusión de información. Para el ámbito educativo, el nuevo plan propone impulsar “mecanismos de colaboración” entre los distintos niveles “para la orientación a resultados en salud”. Además, se potenciará “la formación de los pacientes y cuidadores” sobre la enfermedad cardiovascular y los cuidados que se necesitan.
Como novedad, Sanidad y las comunidades autónomas consideran relevante la difusión de mensajes de salud cardiovascular “a través de las redes sociales” y que estén “supervisados” por proveedores sanitarios. En estos mensajes se incorporarán “experiencias y testimonios de pacientes”, con la colaboración de las organizaciones que los representan.
Al margen de estas actuaciones, la Estrategia apuesta por desarrollar “un mapa accesible” para que la población consulte los “indicadores ideales de salud cardiovascular y de atención a las enfermedades cardiovasculares” y se elaborarán “informes anuales”. Junto a ello, el plan recoge el “uso de la Inteligencia Artificial” y de “herramientas predictivas” que analicen los datos “para la mejora de la atención sanitaria y de los resultados de salud en el paciente”.