La sonrisa es nuestra carta de presentación, por ello, tener unos dientes blancos y alineados es el deseo de la mayoría de las personas.
Por desgracia, a medida que van pasando los años, los dientes se van oscureciendo y pierden su color natural.
Normalmente esto ocurre por la retracción de la pulpa y por el desgaste del esmalte de los dientes, pero también lo ocasionen manos hábitos como:
Alimentación. Hay ciertos alimentos y bebidas que tiñen nuestros dientes. Algunas como el vino tinto, el café el té, y alimentos como la remolacha o las salsas como el kétchup o la mostaza.
Malos hábitos. El consumo de tabaco y alcohol son los principales responsables de la aparición de manchas.
BLANQUEAMIENTO DENTAL
Para poner solución y eliminar las manchas, el blanqueamiento dental es el tratamiento que necesitas.
Es un tratamiento estético conservador con el diente natural que cambia el color natural de los dientes consiguiendo un color más luminoso y devolviendo el brillo natural del esmalte dental.
Existen varios tipos de blanqueamientos, los más comunes son:
Blanqueamiento en casa. En este caso, se diseñan unas férulas muy finas que se colocan en casa. Simplemente tendrás que rellenarlas con un gel blanqueador y llevarlas puestas entre 6 y 8 horas diarias, normalmente entre 2 y 4 semanas.
Blanqueamiento con luz LED. Se realiza exclusivamente en la clínica dental. Al igual que el anterior, se aplica un gel, esta vez de mayor concentración y además, se aplica luz led. El tratamiento es de sesión única durante aproximadamente una hora.
Blanqueamiento mixto. Se combinan los dos tipos de tratamientos de blanqueamiento dental anteriores. Se usa en dientes con una coloración muy oscura y donde queremos conseguir un gran efecto blanqueador.
Blanqueamiento interno. Tratamiento para los dientes endodonciados que se han oscurecido a causa del tratamiento. En este caso se aplica el gel en el interior del diente y se deja actuar hasta conseguir eliminar la tinción.