En los últimos años, la anestesia en odontología ha dejado de ser simplemente una herramienta para controlar el dolor y se ha convertido en un campo de constante innovación tecnológica y farmacológica. “Los anestésicos han experimentado importantes avances tanto en formulación como en técnicas de administración”, explica en declaraciones a Dentalia Jordi Morral, International Sales Director de Laboratorios Inibsa, empresa española líder en el sector de la anestesia dental.
Mejorar la seguridad del paciente, lograr un inicio de acción más rápido y prolongar el efecto anestésico han sido siempre los objetivos perseguidos, explica el experto: “La tendencia se ha centrado en desarrollar anestésicos con un mejor perfil de seguridad, inicio de acción más rápido y una mayor duración del efecto, lo que permite optimizar los procedimientos clínicos y mejorar la experiencia del paciente”.
La precisión en la administración de la anestesia también ha mejorado notablemente. Según Morral, “ha habido una evolución en los sistemas de administración, con el desarrollo de dispositivos más precisos y menos invasivos que reducen el dolor asociado a la inyección y mejoran la dosificación”. Esta transformación no solo beneficia al paciente, sino que facilita el trabajo del profesional, incrementando la eficacia y reduciendo los tiempos clínicos.
“La demanda de anestésicos dentales ha aumentado en los últimos años, impulsada por el acceso a tratamientos, la odontología estética y la concienciación sobre la salud bucodental”
Por otra parte, la seguridad se ha consolidado como uno de los ejes de desarrollo. Morral destaca el avance en anestésicos con “menor toxicidad sistémica, lo que ha permitido ampliar las opciones disponibles para pacientes con condiciones médicas específicas”. Este enfoque responde a una necesidad creciente de adaptar los tratamientos a perfiles clínicos diversos, algo cada vez más presente en la práctica odontológica moderna.
El mercado también refleja esta evolución, ya que, tal y como explica Morral, la demanda de anestésicos dentales se ha incrementado de forma sostenida en los últimos años. “Este crecimiento se debe a factores como el aumento del acceso a tratamientos odontológicos en mercados emergentes, el auge de la odontología estética y la creciente concienciación sobre la importancia de la salud bucodental”.
Además, la transformación digital de la odontología ha impulsado el desarrollo de técnicas mínimamente invasivas, lo que ha incrementado la necesidad de anestésicos con perfiles más sofisticados. “La digitalización y las nuevas técnicas mínimamente invasivas han generado una mayor necesidad de anestésicos de acción rápida y mayor duración”, apunta Morral, señalando que esta tendencia se extiende tanto en clínicas privadas como en el ámbito hospitalario y redes de salud pública.
“La digitalización de la odontología y las nuevas técnicas mínimamente invasivas han generado una mayor necesidad de anestésicos de acción rápida y mayor duración”
En cuanto al futuro, Inibsa continúa apostando por la investigación y el desarrollo de nuevos productos que respondan a las demandas del mercado actual. “En el área de innovación, las investigaciones se centran en mejorar la eficacia, seguridad y comodidad de los anestésicos locales en odontología”, afirma Morral. En concreto, el laboratorio trabaja en cuatro grandes áreas estratégicas: formulaciones avanzadas, nuevas vías de administración, sostenibilidad y personalización del tratamiento.
Sobre las formulaciones, destaca la investigación de “anestésicos con perfiles farmacocinéticos optimizados para reducir efectos adversos y mejorar la duración del efecto”. En el plano de la administración, los dispositivos electrónicos y otros sistemas asistidos buscan “una aplicación más controlada y menos dolorosa, como los sistemas de inyección asistidos electrónicamente”.
La sostenibilidad también se ha convertido en un pilar clave para Inibsa. El directivo explica que actualmente se investiga en soluciones que reduzcan el impacto ambiental, desde envases más sostenibles hasta mejoras en los procesos de producción que permitan minimizar residuos. Finalmente, la personalización del tratamiento se perfila como uno de los grandes retos del futuro. Gracias a las tecnologías emergentes, se busca “seleccionar el anestésico ideal según el perfil del paciente y el tipo de procedimiento, contribuyendo a una práctica clínica más precisa y segura”, destaca Morral.
UNA EMPRESA ESPAÑOLA, REFERENTE INTERNACIONAL
Con más de 75 años de historia, la empresa fundada por el Dr. Pedro Junyent con el objetivo de mejorar la salud de la sociedad española, hoy está presente en más de 60 países, lo que convierte a Inibsa es uno de los actores principales del mercado global de anestesia dental. “Nos distinguimos por nuestra especialización en anestésicos odontológicos, ofreciendo una de las carteras de productos más amplias del mercado”, asegura el director de ventas internacionales. La empresa mantiene una firme apuesta por la calidad y la seguridad, y colabora estrechamente con universidades y centros de investigación para mantener su liderazgo.
Con una clara orientación hacia la innovación, Inibsa continúa desarrollando soluciones que no solo optimizan el rendimiento clínico, sino que también responden a las crecientes expectativas de los pacientes y los profesionales. “Seguimos siendo un referente en la industria, apostando por soluciones innovadoras que garantizan la seguridad de los pacientes y responden a las necesidades de los profesionales de la odontología”, concluye Morral.