Esparza: “Nuestra actividad tiene doble vertiente, sanitaria y empresarial, y la burocracia abruma”

El presidente del Colegio Oficial de Dentistas de Córdoba, Federico Esparza Díaz, analiza la situación actual de la profesión marcada por la saturación profesional, la burocratización y el intrusismo

El Dr. Federico Esparza Díaz, presidente del Colegio Oficial de Dentistas de Córdoba la doble vertiente, sanitaria y empresarial, del trabajo de los odontólogos (Montaje Consalud)
El Dr. Federico Esparza Díaz, presidente del Colegio Oficial de Dentistas de Córdoba la doble vertiente, sanitaria y empresarial, del trabajo de los odontólogos (Montaje Consalud)
Diego Domingo
2 enero 2025 | 12:00 h
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El aumento desmesurado del número de dentistas en España, superior al recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), preocupa profundamente al sector odontológico. Este exceso, más del doble que en muchos países europeos, ha derivado en una plétora profesional que provoca dificultades económicas y laborales.

En declaraciones a Dentalia, el Dr. Federico Esparza Díaz, presidente del Colegio Oficial de Dentistas de Córdoba, reconoce que en su provincia, “la situación en la que se encuentra el sector odontológico es similar al del resto de las provincias españolas, con problemas y preocupaciones que tienen muchos puntos en común en todo el territorio nacional”.

“Nuestra Organización Colegial, viene transmitiendo desde hace tiempo su preocupación a las autoridades públicas por el incremento del número de dentistas en España por encima de la ratio aconsejada por la Organización Mundial de la Salud, siendo a veces más del doble que en la mayoría de los países europeos”, expone Esparza. “Este exceso está determinando que los profesionales de la odontoestomatología trabajen, en ocasiones, en situaciones laborales precarias, siendo quizás más grave en nuestro sector que en otros porque el dentista es un profesional de alta cualificación y su labor se desarrolla exclusivamente dentro del mundo de la Odontología y, por tanto, no se puede reciclar laboral o profesionalmente”, denuncia. 

“El incremento del número de dentistas por encima de la ratio aconsejada por la OMS está determinando que los profesionales trabajen en situaciones laborales precarias”

Esparza, pone sobre la mesa otra condición de la profesión que determina su desempeño profesional: “Teniendo en cuenta que nuestra actividad tiene una doble vertiente, sanitaria y empresarial, estamos obligados al cumplimiento de una ingente legislación referida tanto a una como a otra”. De esta forma, recuerda Esparza, “nos debemos a normas específicas para centros sanitarios y a aquellas otras a las que están obligadas todas las empresas (prevención de riesgos laborales, protección de datos, fiscal, laboral, etc.), lo que ha derivado en una fuerte burocratización de nuestra actividad profesional que, en ocasiones, nos abruma”. 

“Entendiendo que esta vasta normativa deriva en una mayor seguridad para nuestros pacientes”, reconoce el representante de los dentistas de Córdoba que añade: “Pero no es menos cierto que su cumplimiento nos ocupa muchos recursos (de tiempo, materiales y humanos) que, en ocasiones, coartan nuestra verdadera función: trabajar en pos de la salud bucodental de nuestros pacientes”. 

Esparza apunta que sigue sin existir una verdadera concienciación de la población sobre la importancia que tiene la salud bucodental y su repercusión y relación con otras enfermedades. “Retrasar las visitas al dentista y las revisiones orales, a la larga, agrava los problemas su salud oral y que el tratamiento que se necesita realizar sea más costoso”, alerta. 

“Seguimos recibiendo reclamaciones de pacientes que denuncian que su tratamiento bucodental lo ha llevado a cabo una persona que no está ni legal ni científicamente capacitada para ello”

Como profesionales sanitarios, apunta que una de sus prioridades es “la sensibilización de nuestros conciudadanos en la trascendencia que tiene la higiene bucodental y la prevención, diagnóstico precoz y curación de las patologías bucodentales”. 

Una de las lacras que persigue a la profesión odontológica desde hace años es el intrusismo. “Sólo a los odontólogos y estomatólogos nos capacita la Ley para realizar el conjunto de actividades de prevención, diagnóstico y de tratamiento de las enfermedades de la boca, los dientes y los maxilares (sin que ello suponga un límite a las atribuciones y competencias que tienen los maxilofaciales)”, detalla Esparza. “Sin embargo, continuamos recibiendo reclamaciones de pacientes que denuncian que su tratamiento bucodental lo ha llevado a cabo una persona que no está ni legal ni científicamente capacitada para ello”, añade. 

A toda esta situación profesional, el presidente del Colegio Oficial de Dentistas de Córdoba advierte “hay que sumar la plétora profesional que es uno de nuestros problemas fundamentales”. El exceso de dentistas unido a la competencia a la que se ven sometidos por clínicas dentales con titularidad ajena a la profesión y la laxitud de la legislación en materia de publicidad sanitaria, ha generado cierta mercantilización del sector que antes no existía, surgiendo modelos de negocio en la salud oral, que han incrementado la apertura de numerosas clínicas dentales. 

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.
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