El plan de acciones mundiales sobre salud bucodental 2023–2030 de la Organización Mundial de la Salud (OMS) contempla dos metas generales para 2030 que son que los servicios de salud bucodental formen parte de la cobertura sanitaria universal (CSU), contemplando un 80% de la población mundial con derecho a recibir servicios esenciales de atención de salud bucodental. Y por otro lado la reducción de la carga de morbilidad bucodental, recogiendo una reducción relativa del 10% de la prevalencia mundial combinada de las principales enfermedades y afecciones bucodentales para 2030.
En declaraciones a Dentalia, la Dra. Clara María Esteban Escobar, médico especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública y directora médica corporativa en DONTEGROUP, afirma que plan está sustentado en los siguientes principios: “Debe haber un enfoque de salud pública para la salud bucodental, que la salud bucodental esté integrada en la atención primaria de salud, tener modelos innovadores de personal para responder a las necesidades de la población en salud bucodental, una atención de salud bucodental centrada en la persona, intervenciones de salud bucodental adaptadas a todas las etapas de la vida, y una optimización de las tecnologías digitales aplicadas a la salud bucodental”.
La Dra. Esteban explica que “con esta agenda mundial sobre salud bucodental, la OMS busca establecer un camino para mejorar el acceso a la atención de la salud bucodental y hacer que sea más asequible, en consonancia con la cobertura sanitaria universal (CSU)”. El texto invita a los países a que contemplen los objetivos estratégicos y las medidas del documento como una fuente de ideas y de orientaciones para la formulación de sus políticas nacionales de salud bucodental.
“Hay que respaldar y llevar a cabo investigaciones para fortalecer la base empírica de las intervenciones que aborden con eficacia los determinantes de la salud bucodental”
El documento se estructura en seis esferas de actuación (Salud bucodental, promoción de salud bucodental y prevención de las enfermedades bucodentales, personal de salud, atención de salud bucodental, sistemas de información sobre salud y agendas de investigación en salud bucodental). “Estas esferas están armonizadas con los objetivos estratégicos contemplados en la estrategia mundial sobre salud bucodental, y que cuentan, para cada una de ellas, con medidas específicas para los Estados miembro, la Secretaría de la OMS, los asociados internacionales, las organizaciones de la sociedad civil y el sector privado”, explica la Dra. Esteban.
Entre las medidas establecidas por el plan de la OMS, la especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública destaca la enfocada en abordar los factores de riesgo y los determinantes de la salud bucodental e integrar la salud bucodental en programas nuevos o existentes que aborden las enfermedades no transmisibles (ENT) de forma más amplia, en particular los factores de riesgo y determinantes de la salud más habituales. “Hay que respaldar y llevar a cabo investigaciones para fortalecer la base empírica de las intervenciones que aborden con eficacia los determinantes de la salud bucodental, en particular las que reduzcan las desigualdades en este ámbito”, añade.
En cuanto a la medida que establece integrar la atención de salud bucodental en la atención primaria de salud, la Dra. Esteban destaca: “Considerar la posibilidad de incluir prestadores privados de salud bucodental a través de planes adecuados de contratación y/o reembolso. Estudiar cómo optimizar la participación de los prestadores privados de atención de salud bucodental en dichos planes, en particular en los países donde representen una proporción considerable de los prestadores. Refuerza nuestra posición/narrativa ante las instituciones y los decisores políticos”.
“En España se dan las circunstancias necesarias para que el SNS no tenga que invertir en generar nuevas infraestructuras de atención a la población o contratar más dentistas”
La medida número 64 del documento señala que se debe garantizar la protección financiera en la atención de salud bucodental esencial. “Establecer una protección financiera adecuada para los pacientes mediante la ampliación de acuerdos de financiación de pagos respaldados por niveles adecuados de gasto público, de conformidad con las estrategias nacionales de la CSU. Promover y salvaguardar el acceso de los grupos de población vulnerables y/o marginados a unos conjuntos de servicios esenciales de atención bucodental que no les provoquen dificultades económicas. Entronca con las acciones que DONTE GROUP hemos activado en el marco del programa de impacto social, ofreciendo descuentos, tarifas sociales y facilidades de financiación a determinados colectivos”, apunta la experta.
Respecto a la medida que anima a establecer asociaciones público-privadas sostenibles, implicando a los fabricantes y proveedores de productos bucodentales en acuerdos de colaboración éticos, transparentes y a largo plazo con los principales agentes nacionales, para hacer más asequibles estos productos, la Dra. Esteban sostiene: “Esto sería lo más interesante, de cara a las instituciones a las que podamos tantear para plantear la colaboración público-privada, que la OMS abogue por esto fortalece a grupos como DONTE GROUP”.
“En España se dan las circunstancias necesarias para que el SNS no tenga que invertir en generar nuevas infraestructuras de atención a la población o contratar más dentistas”, sostiene la Dra. Esteban. “En concreto, en nuestro país, tenemos cerca de 23.000 clínicas privadas y una de las densidades más elevadas de dentistas por cada 100.000 habitantes de Europa (a 31 de diciembre de 2022 había colegiados en España 40.968 dentistas y había abiertas 22.591 clínicas dentales privadas en la Península, según el Registro General de Centros, Servicios y Establecimientos Sanitarios), con 83,55 dentistas para ese nivel de población para el año 2022, muy por encima de países con unos niveles de protección pública de asistencia bucodental mucho más altos, como pueden ser Suecia o Francia (con 77,86 y 63,59 dentistas por cada 100.000 habitantes, respectivamente)”, añade.
La experta concluye: “Tenemos suficiente capacidad instalada para dar servicio a toda la población mediante acuerdos de colaboración público-privada, algo que sería muy beneficioso para la población y accesible, dada la capilaridad de las clínicas dentales a lo largo de toda la geografía”.