Según datos de la Encuesta de Salud Oral en España 2020, un tercio de los menores de 6 años tiene caries en la dentición temporal y tres de cada 10 niños de 12 años sufren esta patología. Los datos revelan que en España, 450.000 niños tienen caries, lo que supone cerca de 2 millones de dientes temporales afectados por esta patología, la mayoría sin tratar.
Para evitar la aparición de caries es fundamental mantener una buena rutina de higiene bucodental desde recién nacidos y especialmente cuando erupcionan los primeros dientes. Pero la responsabilidad de la higiene dental no puede recaer sobre los menores tal y como indica, en declaraciones a Dentalia, María Noguerado, odontopediatra de Oceanic Ortodoncia y Odontología Infantil: “Muchas veces los padres tienen el pensamiento erróneo de que los niños se pueden cepillar los dientes solos y esto no es así”, asevera.
“Para realizar un correcto cepillado de los dientes hay que tener mucha destreza manual y eso no se adquiere hasta los 10 o 12 años, dependiendo de cada niño”, afirma Noguerado, por eso indica que “a los niños hasta los 6 años le deben cepillar los dientes un adulto”. Aunque se puede permitir que el menor realice un cepillado de los dientes para ir iniciándose en las rutinas de higiene dental, la responsabilidad final recae sobre el adulto responsable.
Los expertos recuerdan que la cantidad de pasta de dientes y la concentración de flúor debe ser apropiada para la edad del niño y el nivel de riesgo de caries.
“A partir de los de los 6 o 7 años, dependiendo siempre de cada caso concreto, puede cepillarse los dientes solo pero siempre con la supervisión final de un adulto que deberá repasar la correcta limpieza de la boca”, explica la odontopediatra.
Los expertos recuerdan que la cantidad de pasta de dientes y la concentración de flúor debe ser apropiada para la edad del niño y el nivel de riesgo de caries. Sobre las rutinas de higiene en la infancia, según la Guía de Salud Oral Infantil, en recién nacidos se deben mantener las encías limpias, masajeándolas con una gasa húmeda y cuando le salga el primer diente, comenzar el cepillado con pasta dentífrica fluorada, usando el equivalente de pasta al tamaño de un grano de arroz. Entre los 2 y 5 años debe usarse para la limpieza el equivalente a un guisante. Y a partir de los 6 años se debe usar la cantidad de pasta del tamaño de un garbanzo.
Los dentistas tienen una labor esencial divulgativa sobre cómo debe realizarse el cepillado. “En la primera consulta enseñamos a los niños cómo deben lavarse los dientes pero también a los mayores cómo deben realizar la higiene dental de los menores”. Además algunos niños “pueden tener alteraciones dentarias que requieran una acción de higiene especial” por lo que las indicaciones del profesional a los padres es fundamental para mantener una buena salud bucodental de los niños.
En la consulta, los expertos también aconsejan sobre el uso de determinadas pastas de dientes y sobre todo la cantidad de pasta que debe usarse según la edad de los menores. “En ocasiones además de la pasta normal con flúor, en casos de hipomineralizaciones, podemos recomendar algunas con suplementos por ejemplo de fosfatos cálcicos para mejorar la mineralización”, indica Noguerado.
“Las caries se producen por falta de cepillado y por consumo de azúcar”
Para comprobar si el cepillado se ha realizado de forma correcta se puede usar un revelador de placa que es un producto que tiñe la placa bacteriana. De esta forma, la placa bacteriana que queda en los dientes tras el cepillado, se vuelve visible, facilitando de este modo su eliminación y ayudando a la prevención de las enfermedades bucales como la caries o las enfermedades periodontales.
“Las caries se producen por falta de cepillado y por consumo de azúcar”, afirma la odontopediatra. “El excesivo consumo de azúcar es el gran problema de la sociedad actualmente, ya que se toman muchos azúcares refinados”, advierte la Dra. Noguerado.
Los dentistas explican que la caries dental no es inevitable y se puede prevenir. Hay varias intervenciones efectivas para la prevención de la caries basadas en la evidencia, que incluyen el cepillado dental con pasta con flúor, consejos sobre la dieta o la colocación de selladores de fisuras y el uso de fluoruros tópicos.