El Plan Integral de Salud Bucodental de Andalucía (PISBDA) representa un ambicioso esfuerzo por mejorar la calidad de vida de los andaluces a través de una atención odontológica de excelencia, centrada en la equidad y la modernización. “El objetivo principal es mejorar la salud bucodental de los andaluces, reduciendo la morbilidad de las enfermedades bucodentales y mejorando la calidad de vida de las personas afectadas”, explica en una entrevista concedida a Dentalia, Alfonso García Palma, coordinador del PISBDA.
Mejorar los servicios de salud bucodental en la Atención Primaria, a través de su reorganización; optimizar la atención en la odontología hospitalaria; fomentar la promoción de la salud en los servicios de odontología; incrementar la captación en la asistencia dental; garantizar la atención sanitaria a grupos específicos, desde la equidad y homogeneidad en la prestación dental; mejorar la capacitación de profesionales, adaptada a los avances en promoción, prevención, diagnóstico precoz e intervenciones bucodentales, y con perspectiva de género; impulsar la investigación en las áreas de salud bucodental y odontología; y mejorar la calidad de los sistemas de información en salud bucodental, son el resto de los objetivos enumerados por García Palma.
La estructura del Plan andaluz se fundamenta en cuatro ejes estratégicos que incluyen 125 acciones a desarrollar. El primero, centrado en la organización, abarca la reorganización de la Unidad de Gestión Clínica (UGC), la odontología hospitalaria y la promoción de la salud comunitaria. El segundo eje, enfocado en el proceso asistencial, atiende a grupos específicos como menores, pacientes con discapacidad, personas mayores y oncológicas, así como a mujeres embarazadas. “Este plan pretende garantizar la atención sanitaria a grupos específicos desde la equidad y la homogeneidad en la prestación dental”, detalla García Palma.
El tercer eje, formación e investigación, busca fortalecer la capacitación profesional y fomentar la investigación en salud bucodental. Finalmente, el cuarto eje se centra en los sistemas de información, “que es una dimensión de análisis en sí”, reconoce García Palma quien explica que se ha diseñado la división en estos “cuatro grandes ejes estratégicos y las subdivisiones de análisis para trabajarlas en grupos multidisciplinares y con representación del 28% de dentistas públicos andaluces”.
“Este plan pretende garantizar la atención sanitaria a grupos específicos desde la equidad y la homogeneidad en la prestación dental”
El Consejo Andaluz de Colegios de Dentistas juega un papel esencial en la implementación y éxito del PISBDA, participando activamente en todas las áreas del proyecto. “En cada acción donde se forme un grupo de trabajo, se ofrece al Consejo que nos mande un representante para participar activamente como un miembro más de dicho grupo de trabajo”, menciona García Palma. Esta colaboración garantiza que los profesionales odontológicos sean parte del proceso, lo cual contribuye a una visión compartida y al desarrollo eficiente de los objetivos del Plan de Salud Bucodental de Andalucía.
La equidad es un principio transversal en el plan, con múltiples acciones dirigidas a asegurar el acceso a servicios de salud bucodental de calidad para todos los grupos de población, especialmente aquellos en situación de vulnerabilidad. Estas medidas incluyen exploraciones escolares priorizando las zonas desfavorecidas; la programación de visitas periódicas, con carácter bianual, a centros de personas con discapacidad; la constitución de una escuela de padres para el manejo de situaciones complicadas relacionadas con el tratamiento bucodental; la realización de un estudio de necesidades sanitarias de salud bucodental entre la población en situación de vulnerabilidad social; además de un programa de valoración de salud bucodental en zonas desfavorecidas para la captación activa y derivación a consulta de odontología en población adulta.
García Palma también recuerda que habrá una coordinación con servicios de trabajo social para la captación y derivación a consulta de odontología de la población adulta en situación de vulnerabilidad social; programación de visitas presenciales a los centros de ayuda a personas en riesgo de exclusión social (personas sin hogar, adicciones) y se establecerán convenios con fundaciones y otras instituciones sin ánimo de lucro con experiencia en atención odontológica a pacientes que reciben asistencia social.
Con respecto a embarazadas y adultos mayores, el experto apunta: “Se llevará a cabo un trabajo colaborativo entre matronas y odontología con las asociaciones locales existentes relacionadas con el embarazo y la lactancia y se diseñará un programa de revisión de la salud bucodental de personas mayores de 65 años. Además está prevista la programación de visitas periódicas en residencias de personas mayores, entre otras acciones”.
“Todos los andaluces dispondrán de un gabinete odontológico público a menos de 30 minutos de su residencia”
El plan incluye una actualización de los gabinetes odontológicos en la comunidad andaluza, mejorando accesibilidad y equipamiento. “Se eligieron 14 ubicaciones para nuevos gabinetes, de tal forma que todos los andaluces dispongan de un gabinete público a menos de 30 minutos de su residencia”, explica el coordinador del PISBDA. Además, se han renovado elementos clave como sillones, autoclaves, equipos de radiografía y ortopantomógrafos. Esta inversión se complementa con una sólida formación para los dentistas del Sistema Sanitario Público de Andalucía (SSPA) en áreas avanzadas como cirugía bucal, endodoncia y odontopediatría, así como en el manejo de pacientes que requieren atención hospitalaria.
“Una vez aprobado el Plan, entramos de lleno en su implantación y estamos desarrollando múltiples acciones y medidas en el momento actual y tenemos finalizada casi el 10% de las acciones totales”, apunta el coordinador del PISBDA. Una vez puesto en marcha el plan, este será evaluado de manera continua para asegurar que se alcancen los objetivos propuestos. García Palma señala que se prevé la elaboración de tres recursos documentales: Planes operativos anuales, informes semestrales de seguimiento, en base al cuadro de mando de indicadores de realización, así como un documento de evaluación final a los 4 años, que incluye los resultados obtenidos en indicadores de resultados e impactos en salud poblacional.
“La evaluación del PISBDA se realizará a partir de los resultados alcanzados en los compromisos adquiridos por los diferentes responsables de proyectos que conforman los planes operativos ejecutados anualmente”, concluye García Palma. Este enfoque basado en indicadores específicos permitirá medir el impacto del plan en la salud bucodental de la población andaluza.