La ortodoncia invisible ha revolucionado la forma en que corregimos nuestras sonrisas. A diferencia de los tradicionales brackets metálicos, los alineadores transparentes ofrecen una alternativa discreta y cómoda. A pesar de que en los últimos años ha habido un gran interés por el tratamiento con alineadores transparentes todavía existen algunos mitos.
Hace ya 25 años que los alineadores revolucionaron la industria dental, con una técnica que puede mejorar mucho la experiencia general del paciente. El Dr. Javier Lozano, ortodoncista y ponente clínico de Invisalign, aclara algunas cuestiones sobre este tratamiento de ortodoncia, que ofrece opciones convenientes, cómodas y asequibles, al tiempo que ayuda a mejorar la salud oral en general. Y lo hace desmontando los 7 mitos más comunes sobre los alineadores invisibles:
1. Condiciona la comida y la bebida: “A diferencia de los brackets, que obligan a los pacientes a ser más cuidadosos con lo que comen para no interferir con el tratamiento, los alineadores transparentes permiten comer y beber lo que quieras. Sólo hay que quitárselos, guardarlos, disfrutar de la comida o bebida que le apetezca a cada uno, lavarse los dientes y volver a ponérselos”, señala el Dr. Javier Lozano.
2. Hay un límite de edad: El objetivo de los alineadores es ofrecer a pacientes de todas las edades la sonrisa que buscan. La edad de inicio del tratamiento puede ser a partir de los seis años y no hay límite de edad, en función de la evaluación del doctor sobre la salud bucal del paciente y su preparación para el tratamiento. “Es el ortodoncista quien tiene que dedicar más tiempo a la planificación. Que el paciente sea adulto no significa que el movimiento final o el resultado vayan a ser peores”, explica el doctor Lozano. “La ortodoncia mejora la masticación. Eso nos ayuda a tener un equilibrio muscular mucho mayor que una persona que muerde más por un lado que por otro, por ejemplo”, añade.
"La ortodoncia mejora la masticación"
3. No es apto para niños: Todo lo contrario. Una maloclusión infantil no tratada puede desarrollar problemas de masticación, habla, crecimiento y desarrollo facial, puede crear problemas en la articulación temporomandibular e incluso afectar emocionalmente al paciente. Gracias a los alineadores transparentes es posible “modificar el crecimiento y la posición de la mandíbula al mismo tiempo que enderezamos los dientes, algo que antes teníamos que hacer con dos o tres aparatos diferentes, lo que resultaba más caro para los padres y, además, dificultaba la adaptación de los niños”, afirma el Dr. Lozano.
4. Es un tratamiento lento: “El tratamiento con alineadores transparentes suele ser más rápido que con brackets. Gracias a la planificación digital del tratamiento, podemos programar el movimiento de dientes concretos”, indica el doctor. Por supuesto, la duración también depende del cumplimiento del paciente. “Si los pacientes no utilizan, por ejemplo, los elásticos indicados por el ortodoncista, el tratamiento será más largo, sea cual sea el aparato”, asegura.
"Gracias a la planificación digital del tratamiento, podemos programar el movimiento de dientes concretos”
5. Los alineadores se vuelven amarillos: Aproximadamente cada 7 días, los alineadores transparentes se sustituyen por un juego nuevo, lo que significa que prácticamente siempre están nuevos porque se cambian muy a menudo. “Con los brackets esto era más complicado, ya que los ‘elásticos’ se cambiaban cada uno o dos meses cuando el ortodoncista realizaba la revisión y mucha gente acumulaba suciedad durante semanas, algo que todos habremos notado. Esto provocaba que los pacientes con brackets tuvieran más bacterias en la boca”, comenta el Dr. Lozano.
6. Se puede realizar el tratamiento sin supervisión médica: El tratamiento con alineadores transparentes requiere siempre la supervisión de un dentista u ortodoncista. “Es importante entender que el movimiento dental es un tratamiento médico que necesita la supervisión de un doctor formado”, destaca. El doctor también advierte del peligro de seguir consejos de las redes sociales y consejos no profesionales sobre tratamientos de ortodoncia.
7. No sirve para todas las maloclusiones: Según el Dr. Lozano, “los alineadores invisibles son una técnica que nos ofrece la tranquilidad de abordar cualquier tratamiento, por complejo que sea el caso”. Además, permiten “alinear los dientes, consiguiendo una mejor mordida, una estética muy mejorada y una masticación equilibrada, que refuerza la autoestima del paciente y le permite sentirse mejor consigo mismo”. Aproximadamente el 90% de las maloclusiones pueden tratarse con los alineadores transparentes.