El embarazo es una etapa en la vida de la mujer que conlleva múltiples cambios fisiológicos, y entre ellos, la salud bucodental no es una excepción. Cada vez existe más evidencia científica que respalda la conexión entre el embarazo y la salud oral, subrayando la importancia de los cuidados bucodentales durante los nueve meses de gestación.
“La mujer tiene cambios durante el embarazo en todo el cuerpo y por supuesto también en la boca, que obedecen principalmente a un aumento de hormonas durante la gestación como son los estrógenos y la progesterona”, afirma en declaraciones a Dentalia, Leonor Martín-Pero Muñoz, higienista dental y vicepresidenta del Colegio profesional de higienistas dentales de Madrid. La experta explica que “con el aumento de estos estrógenos y progesterona lo que se va a producir en los tejidos gingivales es un aumento de la permeabilidad de estos tejidos lo que va a favorecer la inflamación gingival que es lo que se denomina gingivitis gravídica”.
La gingivitis gravídica es más frecuente en el segundo trimestre del embarazo
Este tipo de gingivitis se da específicamente durante la etapa de embarazo en las mujeres pese a que sufren cambios hormonales en otras etapas de su vida como pueden ser la pubertad o la menopausia. Es más frecuente en el segundo trimestre del embarazo, relacionada con mala higiene, la dieta, la respuesta inmune, alteraciones hormonales y vasculares. El aumento de estrógeno y progesterona produce vasodilatación capilar favoreciendo el exudado y la permeabilidad gingival. Sin embargo, la placa gingival es el factor causante principal para la aparición de la gingivitis. Los expertos indican que hasta el 70% de las mujeres embarazadas pueden experimentar algún grado de gingivitis durante este periodo.
“Otra inflamación típica de esta etapa de la mujer es la epulis del embarazo que es un agrandamiento de la encía que se produce de manera más puntual y localizada”, afirma Martín-Pero Muñoz. “No es algo grave pero sí es incómodo porque sangra cuando te lo tocas al cepillarte”, añade. Esta patología también puede ser conocida como granuloma del embarazo o tumor del embarazo. Este crecimiento localizado de la encía suele remitir después del parto y lo más habitual es que se de en los primeros meses del embarazo durante el primer y segundo trimestre.
La epulis del embarazo es un crecimiento localizado de la encía que suele remitir después del parto
La higienista apunta que ante la posibilidad de sufrir estas patologías mantener una buena higiene oral es más importante durante el embarazo ya que de no ser así estas “inflamaciones gingivales se van a ver aumentadas”. “La higiene durante el embarazo tiene que ser muy exquisita ya que sabemos que, de base, sólo por estos cambios hormonales podemos tener alteraciones en el tejido gingival”, indica.
Durante el embarazo se produce la hormona de la relaxina, cuya función es relajar las articulaciones para facilitar el parto, y también actúa en el ligamento periodontal que es la estructura que ayuda a sujetar los dientes, lo que puede provocar una ligera movilidad dentaria que tiende a desaparecer después del parto.
En la etapa de gestación se ve alterada la composición salival y la flora oral produciéndose xerostomía fisiológica que produce sequedad bucal lo que favorece la aparición de caries. “Se dice que la madre pierde un diente por cada bebe”, indica Martín-Pero Muñoz quien desmiente que esto siempre sea así. “No tenemos porqué tener más caries durante el periodo de gestación. Pero sí que es verdad que el embarazo afecta a la producción de saliva. Por eso un gran aliado para nosotros durante este periodo va a ser el flúor”, afirma la higienista.
Una revisión bucodental en el principio del proceso de gestación sirve para detectar posibles patologías existentes y realizar una valoración profesional de la higiene oral de la embarazada
Una revisión profesional de la boca en mujeres embarazadas sirve para detectar posibles patologías existentes y realizar una valoración de la higiene bucodental que el especialista puede utilizar para ofrecer recomendaciones para mejorarla. “En muchos casos se recomienda prestar especial atención a la higiene interdental con el uso de seda dental en personas que no la usen a diario”, indica la higienista.
En cuanto a la rutina de cepillado, los higienistas recuerdan a las embarazadas que deben llegar a todas las superficies dentarias: externas, internas y las de masticación. Recuerdan que la presión ejercida no debe ser excesiva ya que podemos llegar a dañar los dientes y encías. Actualmente se recomienda no enjuagar con agua tras el cepillado, por lo que se debe usar la cantidad adecuada de pasta para no necesitar hacerlo.
Comer de manera saludable es otro de los consejos de los dentistas para prevenir enfermedades orales durante el embarazo. Se recomienda reducir el consumo de alimentos y bebidas con alto contenido de azúcar y sobre todo evitar los azúcares añadidos, muy presentes en los alimentos procesados y ultraprocesados, sustituirlos por frutas, verduras y hortalizas. Los expertos recuerdan que el agua es un gran aliado durante el embarazo.
La prevención, el cuidado personal y las revisiones regulares son los pilares fundamentales para garantizar una salud bucal óptima durante el embarazo. Cuando una mujer tiene previsto quedarse embarazada o cuando sabe que lo está, Martín-Pero Muñoz recomienda “incluir una visita a la consulta dental dentro de los chequeos médicos que se hacen ante este proceso de vida”.