Cada vez que termina un año hacemos balance y nos proponemos nuevas metas, nuevos propósitos. Mantener una buena salud bucodental va más allá de lucir una sonrisa atractiva: es esencial para el bienestar general. La boca es la puerta de entrada al cuerpo y, cuidarla adecuadamente, impacta positivamente en la salud global. La higiene oral adecuada previene problemas como caries, gingivitis o mal aliento. Además, numerosos estudios conocidos recientemente vinculan la salud bucal con enfermedades sistémicas. Cuidar nuestros dientes y encías no solo asegura una boca sana, sino también contribuye a la salud cardiovascular y general.
A punto de comenzar un nuevo año, la odontóloga de MC2, Cristina Moreno, nos aporta diez consejos para tener una buena salud bucodental durante todo el año que combinan prácticas de higiene oral, hábitos de vida saludable y medidas preventivas que son accesibles para la mayoría de las personas.
1. EL PODER DE LA HIDRATACIÓN
La hidratación no solo es vital para la salud general, sino también para la salud oral. "El agua ayuda a mantener un equilibrio saludable en la microbiota oral para prevenir enfermedades como la caries dental, la gingivitis y otras sistémicas, como las que incluyen problemas gastrointestinales e incluso, según algunas investigaciones, trastornos neurológicos como el Alzheimer", explica la odontóloga. Mantener una buena hidratación asegura una producción adecuada de saliva, que es crucial para neutralizar ácidos y proporcionar minerales esenciales para fortalecer el esmalte dental.
2. CEPILLADO EFECTIVO
El cepillado regular y adecuado es fundamental para controlar la acumulación de placa y la proliferación de bacterias dañinas en la boca. Además, ayuda a mantener un equilibrio saludable en la microbiota oral. "Hay que tener en cuenta que el cepillado debe ser completo ya que cada pieza dental tiene que ser limpiada en sentido vertical para no dañar el esmalte", advierte la Dra. Moreno. Muchas personas no tienen paciencia y les cuesta estar el tiempo necesario. Si es tu caso, haz pequeños paseos mientras limpias tu boca o incluso pequeñas series de estiramientos en las piernas.
3. USO DEL HILO DENTAL
No estamos acostumbrados pero es una técnica sencilla y efectiva, y hay que incorporarla al cepillado dental. "El hilo es esencial para limpiar los espacios interdentales y bajo la línea de las encías que son lugares donde el cepillo no puede llegar", recuerda la dentista.
4. LIMPIEZA LINGUAL
La lengua es de por si un elemento limpiador de los dientes, y al hacerlo también se ensucia. "La limpieza de la lengua elimina bacterias y residuos que pueden afectar negativamente a la microbiota oral", afirma Moreno. Esta práctica también contribuye a un aliento fresco y a una mejor salud general de la boca.
5. VISITAS REGULARES AL DENTISTA
Las visitas habituales al dentista son cruciales para mantener una buena salud oral. El profesional puede detectar y tratar problemas antes de que se conviertan en algo más serio, además de ofrecer consejos personalizados para cada paciente.
Según el Libro Blanco 2023 de Salud Oral el 67% de los españoles declara tener algún problema bucodental
6. DIETA EQUILIBRADA
Una dieta rica en nutrientes y baja en azúcares ayuda a mantener una buena salud y microbiota oral. Además, "los alimentos ricos en fibras promueven la producción de saliva que es un elemento clave para el equilibrio bucal", recuerda la experta.
7. REDUCIR EL CONSUMO DE AZÚCARES Y ÁCIDOS
Los alimentos, bebidas azucaradas y ácidos pueden alterar el equilibrio de la microbiota oral, favoreciendo la aparición de caries y enfermedades de las encías. "Reducir su consumo es vital para la salud oral", recalca la odontóloga.
8. EVITAR EL TABACO
Fumar afecta negativamente a la microbiota oral, aumentando el riesgo de enfermedades periodontales y de cáncer oral. Dejar de fumar es un paso importante para mejorar la salud.
9. MASTICAR CHICLE SIN AZÚCAR
"Es más bien un truco, más que un consejo, para ayudarnos cuando no podamos lavar nuestra boca", reconoce la Dra. Moreno. Masticar chicle sin azúcar, especialmente después de las comidas, puede aumentar la producción de saliva y ayudar a neutralizar los ácidos en la boca.
10. MANEJAR EL ESTRÉS
El estrés tiene un impacto significativo en la salud bucal. Las reacciones bioquímicas desencadenadas por la ansiedad y el miedo, como el aumento de cortisol, pueden tener efectos perjudiciales en el cuerpo. "El cortisol elevado puede disminuir la función inmunológica, aumentar la inflamación y alterar el equilibrio de la microbiota oral, lo que puede conducir a problemas como la enfermedad periodontal y el bruxismo", explica Moreno. Además, el estrés crónico puede afectar la producción y calidad de la saliva, esencial para la neutralización de ácidos y la remineralización dental. Por tanto, el manejo efectivo del estrés mediante técnicas de relajación, ejercicio regular y terapia, puede ser un componente crucial para mantener una salud oral óptima.