La imagen personas es una de las principales preocupaciones estéticas y en ella entra en juego la sonrisa, ya que es una parte fundamental en nuestro rostro.
Es por ello que los tratamientos de Medicina Estética son cada vez más demandados. Y en este sentido, los maxilofaciales son los más solicitados tanto por hombres como por mujeres, aun que es cierto que en los últimos años el aumento de pacientes masculinos ha ido en aumento.
En el caso de los hombres, la mandíbula es una parte importante del rostro, y es por ello que muchos de ellos se realizan tratamientos estéticos para tenerla mucho más marcada.
PERFIL DEL PACIENTE
Federico Hernández Alfaro, director del Instituto Maxilofacial de Barcelona y Catedrático de Cirugía Maxilofacial, explica que el perfil de los pacientes es muy variado, pero por norma general son hombres y mujeres entre 25 y 44 años.
Uno de los tratamientos con más éxito es la ‘Barcelona Line’. Una línea vertical que parte de la raíz de la nariz y sigue perpendicular al suelo. Este tiene múltiples beneficios:
Quiero lo que veo. Se puede trazar fácilmente en una fotografía del paciente en una posición relajada y sonriente, lo que la convierte en una referencia simple y accesible para el análisis facial.
Belleza armónica del rostro. La técnica permite decidir la mejor manera de recolocar los huesos de la cara para crear un rostro más armonioso, lo que se logra mediante la reposición del maxilar y la mandíbula.
Tu rostro, tu elección. Con la guía, los pacientes pueden entender mejor cómo se ve su rostro y decidir qué cambios estéticos desean hacer. La ‘Barcelona Line’ es una herramienta diagnóstica y de planificación simple, individualizada y reproducible.
En la mayoría de los casos, son tratamientos que se realizan para buscar un cambio estético, pero además de esto, también se pueden obtener beneficios para la salud. Este procedimiento es especialmente curativo para pacientes con apnea obstructiva del sueño.
“La buena noticia es que tras la cirugía de avance maxilo-mandibular, los pacientes que se han operado por razones estéticas descubren que pueden respirar mucho mejor, y aquellos que se han sometido a cirugía por razones funcionales para combatir su apnea del sueño, despiertan con un rostro mucho más armonioso”, cuenta el profesor Alfaro.