Un equipo investigador de la Universitat Rovira i Virgili de Tarragona (URV) ha realizado un estudio sobre la dieta mediterránea y su relación con la salud y ha constatado que "provoca cambios en determinadas bacterias intestinales y esto comporta la mejora del metabolismo de la glucosa y la insulina".
Para el ensayo se ha hecho el seguimiento de 50 persones adultas con síndrome metabólico y una alimentación "poco saludable", que siguieron con su dieta habitual suplementada con 50 gramos de frutos secos en el día durante dos meses y cambiaron a una dieta mediterránea los dos siguientes, ha informado el URV en un comunicado este miércoles.
La glucosa, la insulina y la resistencia a la insulina mejoraba después de seguir la dieta mediterránea: en concreto, incrementaba la cantidad de Lachnospiraceae NK4A136
Tras comparar las dos intervenciones, el estudio apunta a que la glucosa, la insulina y la resistencia a la insulina mejoraba después de seguir la dieta mediterránea: en concreto, incrementaba la cantidad de Lachnospiraceae NK4A136, "un género bacteriano que se relaciona con la mejora metabólica observada sobre todo mediante la regulación del metabolismo de los ácidos biliares".
Los resultados del ensayo también sugieren que la dieta mediterránea puede relacionarse con modificaciones en la composición de la microbiota intestinal y con una reducción de los factores de riesgo cardiometabólico, algo que explicaría "el beneficio de la dieta mediterránea sobre determinados aspectos de salud".
El estudio lo ha llevado a cabo un equipo investigador del Departamento de Bioquímica y Biotecnología de la URV, liderado por la investigadora Mònica Bulló, y ha participado personal investigador del Institut Català de la Salut (ICS) y del centro de investigación Donders Institute for Brain, Cognition and Behaviour (Países Bajos).