El presidente de la Generalitat catalana, Quim Torra, ha afirmado este martes que comienzan a haber buenas noticias sobre el brote de coronavirus en Lleida, que espera que se confirmen a lo largo de esta semana, pero ha pedido que se deben analizar con "serenidad" y prudencia.
En rueda de prensa junto al vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonès, tras el Consell Executiu, ha destacado que estas noticias positivas que reciben de Lleida significan que las medidas que se han aplicado están empezando a funcionar y lo ha contrapuesto con la situación en el área metropolitana de Barcelona, donde asegura que la situación "es preocupante".
Torra ha sostenido que en todo momento siguen las instrucciones técnicas del Procicat y que no le "temblará el pulso"
"Vamos a poner aquí todos los esfuerzos", y ha alertado de que las medidas restrictivas ya afectan a más de la mitad de la población catalana, por lo que ha insistido en que esta es la prioridad absoluta del Govern en estos momentos.
Torra ha sostenido que en todo momento siguen las instrucciones técnicas del Procicat y que no le "temblará el pulso" para tomar las decisiones que se tengan que tomar si la situación empeora en algún punto del territorio catalán.
SANCIONES ANTE INCUMPLIMIENTOS
El jefe del Ejecutivo catalán ha llamado a la ciudadanía a concienciarse de la necesidad de adoptar un compromiso social para aplicar las medidas sanitarias que pide el Govern: "Tenemos que asumir que tenemos que protegernos para proteger a los demás", y ha apuntado que hay que aprender a convivir con el virus.
Sin embargo, al ser preguntado por si se sancionarán los incumplimientos, Torra ha explicado que ha dado instrucciones al conseller de Interior, Miquel Buch, para que traslade a los Mossos d'Esquadra que hay que ejercer el poder sancionador que recoge la normativa aprobada por el Govern para restringir las actividades ante el repunte del coronavirus: "Los incumplimientos se tienen que sancionar".
PERE ARAGONÈS
Aragonès ha argumentado que las medidas que aplique el Govern deben ir acompañadas de "nuevos hábitos" que tienen que adoptar todos los ciudadanos para acostumbrarse a convivir con el Covid-19 hasta que no haya vacuna.
Además, ha apoyado que las policías locales y los Mossos puedan sancionar a las personas que incumplan las medidas: "No es por él, sino porque está haciendo daño a la colectividad".