Se ha publicado en la revista "PLOS ONE" un estudio realizado por Irena Ilic, de la Universidad de Belgrado (Serbia), en el que argumentan que las muertes por suicido con arma de fuego disminuyeron en todo el mundo entre 1990 y 2019, aunque en algunos países se registró una tendencia al alza.
Los suicidios con armas de fuego representan un importante problema de salud pública en muchos países. El seguimiento y la comprensión de las estadísticas de suicidios con armas de fuego pueden ayudar a informar los esfuerzos para reducir las muertes. Sin embargo, pocos estudios han examinado las tasas de mortalidad por suicidio con arma de fuego a escala mundial.
Para mejorar la comprensión de este problema, Ilic y sus colegas analizaron los datos de suicidio por arma de fuego para hombres y mujeres de 204 países y territorios.
En 2019, el análisis reveló que se produjeron 52.694 muertes por suicidio con arma de fuego en todo el mundo
Utilizando estos datos, calcularon las tasas de mortalidad estandarizadas por edad por suicidio con arma de fuego; esta medida tiene en cuenta las variaciones en las tasas de mortalidad por suicidio con arma de fuego observadas entre los diferentes grupos de edad y las diferentes proporciones de personas de diferentes edades que componen las poblaciones de los diferentes países.
En 2019, el análisis reveló que se produjeron 52.694 muertes por suicidio con arma de fuego en todo el mundo, lo que supone una tasa de mortalidad estandarizada por edad de 0,65 muertes por cada 100.000 personas.
A nivel mundial, las tasas fueron seis veces más altas para los hombres que para las mujeres en este año (45.110 muertes en hombres y 7.584 en mujeres). Las tasas más elevadas de suicidios con armas de fuego, tanto en hombres como en mujeres, se registraron en Groenlandia y Estados Unidos, seguidos de países desarrollados como Francia, Canadá, Finlandia, Suiza y Noruega. Las tasas más bajas se registraron en China, Japón y Singapur.
Las tasas más elevadas de suicidios con armas de fuego, tanto en hombres como en mujeres, se registraron en Groenlandia y Estados Unidos, seguidos de países desarrollados como Francia, Canadá, Finlandia, Suiza y Noruega. Las tasas más bajas se registraron en China, Japón y Singapur
En todo el mundo, los suicidios con armas de fuego disminuyeron entre 1990 y 2019, y los mayores descensos se observaron en Singapur, Sri Lanka, Australia y Suiza. Sin embargo, se observaron aumentos en 31 países, especialmente en los países en desarrollo, como Jamaica, Venezuela y Egipto. En algunos países, como Afganistán, las tasas aumentaron para las mujeres pero no para los hombres.
Los autores señalan que los datos utilizados para este estudio pueden estar incompletos en algunos países, así como la falta de estandarización de los datos de suicidio entre países. No obstante, los resultados podrían contribuir a los esfuerzos de salud pública para reducir los suicidios con armas de fuego en todo el mundo.
Los autores añaden que "existen grandes diferencias internacionales en los patrones de mortalidad por suicidio con arma de fuego. A pesar de las tendencias de disminución de la mortalidad por suicidio con arma de fuego en la mayoría de las zonas, observadas en ambos sexos y en todos los grupos de edad, en 31 países se registraron tendencias de aumento de la mortalidad por suicidio con arma de fuego", alertan.