El Sindicato Médico de Euskadi (SME) ha expresado su "profunda indignación" por la "campaña de desprestigio" a los profesionales médicos por parte del Departamento de Salud del Gobierno Vasco. Además, ha criticado la reorganización de los servicios anunciada por la consejera Gotzone Sagardui con "medidas paliativas que no conducen a nada", y ha exigidose centre en buscar soluciones, en vez de aplicar medidas paliativas que "busque, de verdad, soluciones para garantizar la Atención Primaria y el Sistema de Salud Público"de calidad".
En un comunicado, el SME ha lamentado las declaraciones realizadas en los últimos días por Sagardui, la directora general de Osakidetza y la Subdirectora de Atención Primaria, porque, "en vez de reconocer la labor ingente del personal facultativo y potenciar la figura del colectivo médico", se asiste "con asombro y enfado a una campaña de desprestigio de los profesionales de cara a la ciudadanía".
"Cada cual tiene sus inquietudes personales y su derecho a decidir cuándo y cómo quiere comenzar su trayectoria profesional. Es algo que todo el mundo debería respetar"
En este sentido, se ha referido a las manifestaciones de las responsables de Salud sobre que "se están ofertando 3.000 euros en horario de 8.00 a 15.00 horas o que hay MIR que han terminado su formación y se toman unos meses sabáticos o se van a una ONG".
En resumen, cree que se les pretende presentar "como unos hippies que no quieren trabajar ni siquiera por un dineral". "Cada cual tiene sus inquietudes personales y su derecho a decidir cuándo y cómo quiere comenzar su trayectoria profesional. Es algo que todo el mundo debería respetar", ha añadido.
Además, el sindicato médico ha destacado que el salario medio bruto de los vascos ronda los 2.278 euros al mes, y considera que, "para una persona que se ha pasado 10 años de su vida formándose y capacitándose para poder ejercer su profesión y cuya máxima responsabilidad es cuidar de la salud y vida de la población, 700 euros de diferencia no parecen una barbaridad".