El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha condenado a la Consejería de Sanidad de Castilla y León a indemnizar con 50.000 euros una cirujana, C.R.R., al estimar que hubo una mala praxis en la asistencia sanitaria que le fue prestada con motivo de una intervención quirúrgica en el Hospital Universitario de Burgos el día 14 de julio de 2017, cuando contaba con 60 años, al extirparle un hueso sin su permiso.
La sentencia ha sido dictada por la Sala de lo Contencioso Administrativo de TSJCyL, con sede en Valladolid, con motivo de la demanda tramitada por los Servicios Jurídicos de la Asociación 'El Defensor del Paciente', según la información facilitada por dicho colectivo recogida por Europa Press.
Como tratamiento, se pautó una intervención quirúrgica consistente en la extirpación del ganglio y del osteofito que tiene en la base del trapecio derecho
La afectada, C.R.R., cirujana de profesión en el propio HUBU, fue diagnosticada de artrosis trapecio metacarpiana derecha y lesión nodular subcutánea. Como tratamiento, se pautó una intervención quirúrgica consistente en la extirpación del ganglio y del osteofito que tiene en la base del trapecio derecho.
Dicha intervención se llevó a cabo el día 14 de junio de 2017 en el mismo centro donde trabajaba. No obstante, en realidad, la intervención que se llevó a cabo fue diferente a la prevista e indicada pues se extirpó el segundo hueso metacarpiano que no era objeto de la intervención. Además, se lesionó el nervio mediano y el tendón flexor radial del carpo. En definitiva, se lesionó un hueso que no estaba dañado ni era objeto de intervención.
La víctima tuvo que ser de nuevo intervenida para mitigar los daños causados de la primera intervención el día 14 de abril de 2018. Esta vez fue operada en la sanidad privada. A pesar del éxito de esta segunda intervención, la paciente sufre secuelas y daños graves irreversibles en la mano derecha derivados de la primera intervención.