Una mala salud dental puede desembocar en una periodontitis que, a su vez, pueden derivar en problemas cardíacos o incluso digestivos, pero ¿puede afectar también al riesgo de padecer Alzheimer?
Un análisis de todos los estudios pertinentes publicados en la literatura médica indica que la mala salud periodontal y la pérdida de dientes pueden aumentar el riesgo de deterioro cognitivo y de demencia. El análisis, publicado en el 'Journal of the American Geriatrics Society', incluyó 47 estudios.
La mala salud periodontal (reflejada en la presencia de periodontitis, pérdida de dientes, bolsas periodontales profundas o pérdida de hueso alveolar) se asoció con un 23% más de probabilidades de deterioro cognitivo y un 21% más de riesgo de demencia.
La pérdida de dientes por sí sola se relacionó con un 23% más de probabilidades de deterioro cognitivo y un 13% más de riesgo de demencia
La pérdida de dientes por sí sola se relacionó con un 23% más de probabilidades de deterioro cognitivo y un 13% más de riesgo de demencia. Sin embargo, la calidad general de las pruebas fue baja.
La demencia es un síndrome caracterizado por el deterioro cognitivo progresivo y la incapacidad funcional. Más de 50 millones de personas están afectadas por la demencia en todo el mundo y, debido al aumento del envejecimiento de la población, se espera que la prevalencia de la demencia se triplique para el año 2050, tal y como recuerdan los investigadores del estudio.
Un deterioro cognitivo menos grave, como el deterioro cognitivo leve (DCL), denota un declive cognitivo patológico en el que se conserva en gran medida la independencia funcional. Su prevalencia varía significativamente entre diferentes grupos de población, oscilando entre el 5 y el 41%.
Los resultados de esta revisión podrían indicar la participación de múltiples mecanismos en la asociación entre la salud periodontal y la cognitiva
Así las cosas, los resultados de esta revisión podrían indicar la participación de múltiples mecanismos en la asociación entre la salud periodontal y la cognitiva. Se ha sugerido que la periodontitis facilita el desarrollo de la neuroinflamación a través de la inflamación sistémica.
La inflamación sistémica per se es un determinante independiente del deterioro cognitivo y vincula otros factores de riesgo, como la diabetes, la hipertensión, la hipercolesterolemia e incluso el envejecimiento, con el deterioro cognitivo. Además, se ha sugerido un papel más directo de los patógenos periodontales, que se suma al creciente conjunto de pruebas sobre la posible etiología infecciosa del deterioro cognitivo.
La pérdida de dientes también puede perjudicar de forma independiente la cognición al reducir la estimulación sensoriomotora del aparato masticatorio, lo que se ha relacionado con cambios cerebrales atróficos.
"Desde una perspectiva clínica, nuestros hallazgos enfatizan la importancia de la supervisión y el manejo de la salud periodontal en el contexto de la prevención de la demencia, aunque la evidencia disponible aún no es suficiente para señalar formas claras para la identificación temprana de los individuos en riesgo, y las medidas más eficientes para prevenir el deterioro cognitivo", escriben los autores.