Los hospitales Sant Joan de Déu de Esplugues de Llobregat (Barcelona) y Clínic de Barcelona han realizado el primer trasplante cruzado en España de riñón pediátrico entre personas de grupo sanguíneo incompatible.
En una rueda de prensa este miércoles, han explicado que se ha podido implantar un riñón de adulto llegado de Sevilla a Candela, una niña de 8 años de Esplugues de Llobregat (Barcelona) con problemas renales desde que tenía 20 meses.
La niña perdía proteínas por la orina y se le diagnosticó enfermedad renal crónica; se le hizo un primer trasplante cuando tenía cuatro años pero a las 24 horas se le produjo trombosis en el nuevo órgano, por lo que tuvo que estar cuatro años más haciendo diálisis.
Los equipos médicos encontraron la solución en el programa de trasplante cruzado, por lo que el padre de la niña dio también su riñón para el receptor de Sevilla; el trasplante cruzado funciona con combinaciones de dos o más parejas de donante-receptor incompatibles entre sí, que generan una cadena de trasplantes.
SIETE CASOS
La directora de la Organización Nacional de Trasplantes, Beatriz Domínguez Gil, ha explicado que se han producido en España siete trasplantes cruzados con dicha incompatibilidad sanguínea; el de Candela es el primero pediátrico, de ahí su excepcionalidad.
El trasplante cruzado funciona con combinaciones de dos o más parejas de donante-receptor incompatibles entre sí, que generan una cadena de trasplantes
La complejidad del caso residió, han explicado los médicos, en la superposición de complicaciones: la incompatibilidad de grupo sanguíneo con el donante, el volumen del órgano recibido, que debía caber en el cuerpo de una niña, y el proceso de supresión del sistema inmunitario de la paciente que requieren estas operaciones para evitar que se rechace el órgano recibido.
Los responsables médicos de ambos hospitales también han destacado la importancia de la coordinación entre centros, que se produce en trasplantes pediátricos desde que el Clínic dejó de tratar a pacientes pediátricos pero sigue ayudando a Sant Joan de Déu en dichos temas.
El director médico de Sant Joan de Déu, Miquel Pons, ha celebrado que "se sigue dando respuesta a la alta complejidad" incluso durante la pandemia de Covid-19, y su homólogo del Clínic, Antoni Castells, ha asegurado que la operación ha supuesto un hito científico, tecnológico y humano.
TRASPLANTES DE DONANTE VIVO
El jefe del servicio de Urología del Clínic, Antonio Alcaraz, ha señalado que intentaron aprovechar las cicatrices de la primera operación de Candela para no generarle nuevas marcas, y ha dicho que las dificultades derivadas del tamaño del nuevo riñón y los problemas de coagulación de la menor tuvieron al equipo médico "en jaque" durante unos días.
El jefe del servicio de Nefrología de Sant Joan de Déu, Álvaro Madrid, ha defendido potenciar los trasplantes de donante vivo y ha recordado que la operación también contó con la implicación de los servicios de laboratorio o UCI de ambos hospitales.
El médico consultor Ignacio Revuelta ha apostado por "romper las reglas del juego y seguir creciendo", en referencia a buscar soluciones científicas innovadoras para potenciar el programa de trasplante cruzado, y ha asegurado que el logro presentado este miércoles va a tener impacto en el mundo del trasplante.
La nefróloga de Sant Joan de Déu Yolanda Calzada ha subrayado la complejidad de eliminar los anticuerpos del organismo de la niña de forma previa al trasplante, con una carga inmunosupresora superior a la habitual, y ha aclarado que la paciente deberá tomar estos medicamentos toda su vida: "El riesgo va a estar siempre, pero esperamos que la necesidad de inmunosupresión vaya disminuyendo con los años".
Por último, el padre de la niña, Alberto, ha asegurado que dar un riñón ha sido "la decisión más fácil" que ha tomado en su vida, y ha llamado a reflexionar sobre la solidaridad a través de los impuestos para sostener el sistema sanitario público.