Investigadores de la Universidad de Cambridge (Reino Unido) han desarrollado una nueva prueba que 'pesca' varios virus respiratorios a la vez utilizando como 'cebo' cadenas simples de ADN y que ofrece resultados muy precisos en menos de una hora.
La prueba utiliza 'nanobaits' de ADN para detectar al mismo tiempo los virus respiratorios más comunes, como los de la gripe, el rinovirus, el VRS y la COVID-19. En comparación, las pruebas PCR, aunque son muy específicas y precisas, sólo pueden detectar un único virus a la vez y tardan varias horas en dar un resultado.
Aunque muchos virus respiratorios comunes tienen síntomas similares, requieren tratamientos diferentes. Al detectar varios virus a la vez, los investigadores afirman que su prueba garantizará que los pacientes reciban rápidamente el tratamiento adecuado y podría reducir el uso injustificado de antibióticos. Además, las pruebas pueden utilizarse en cualquier entorno y modificarse fácilmente para detectar diferentes bacterias y virus, incluidas posibles nuevas variantes del SARS-CoV-2, el virus causante de la Covid-19.
"Ayuda a garantizar que los pacientes reciban rápidamente el tratamiento correcto y a reducir el uso de antibióticos injustificados"
La temporada invernal de resfriados, gripe y VSR ha llegado al hemisferio norte, y el personal sanitario debe tomar decisiones rápidas sobre el tratamiento cuando los pacientes se presentan en su hospital o clínica. "Muchos virus respiratorios tienen síntomas similares pero requieren tratamientos distintos: queríamos ver si podíamos buscar varios virus en paralelo. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los virus respiratorios son la causa de muerte del 20% de los niños menores de cinco años. Si se consiguiera una prueba que pudiera detectar múltiples virus de forma rápida y precisa, podría suponer una gran diferencia", ha comentado Filip Boskovic, del Laboratorio Cavendish de Cambridge y primer autor del artículo, que se ha publicado en la revista científica 'Nature Nanotechnology'.
Para Boskovic, la investigación también es personal: de pequeño, estuvo casi un mes en el hospital con fiebre alta. Los médicos no pudieron averiguar la causa de su enfermedad hasta que se dispuso de una máquina de PCR. "Un buen diagnóstico es la clave de un buen tratamiento. La gente se presenta en el hospital con necesidad de tratamiento y puede ser portadora de múltiples virus diferentes, pero a menos que se pueda discriminar entre los distintos virus, existe el riesgo de que los pacientes reciban un tratamiento incorrecto", ha señalado Boskovic.
Los investigadores querían desarrollar una prueba que utilizara el ARN para detectar los virus directamente, sin necesidad de copiar el genoma, pero con la sensibilidad suficiente para ser útil en un entorno sanitario. "En el caso de los pacientes, sabemos que un diagnóstico rápido mejora su pronóstico, por lo que poder detectar rápidamente el agente infeccioso podría salvarles la vida. Para el personal sanitario, una prueba de este tipo podría utilizarse en cualquier lugar, en el Reino Unido o en cualquier entorno de ingresos bajos o medios, lo que ayuda a garantizar que los pacientes reciban rápidamente el tratamiento correcto y a reducir el uso de antibióticos injustificados", ha destacado Stephen Baker, otro de los líderes de la investigación.
Los investigadores basaron su prueba en estructuras construidas a partir de cadenas dobles de ADN con cadenas simples sobresalientes. Estas cadenas simples son el 'cebo': están programadas para 'pescar' regiones específicas en el ARN de los virus diana. A continuación, los 'nanobaits' se hacen pasar a través de unos agujeros diminutos llamados nanoporos. La detección por nanoporos es como un lector de teletipos que transforma las estructuras moleculares en información digital en milisegundos. La estructura de cada 'nanobait' revela el virus objetivo o su variante.
Los investigadores demostraron que la prueba puede reprogramarse fácilmente para discriminar entre variantes víricas, incluidas variantes del virus que causa la Covid-19. El método permite una especificidad cercana al 100% gracias a la precisión de las estructuras 'nanobait' programables.