El salón de actos del Ilustre Colegio de Médicos de Huesca ha acogido la primera de las tres jornadas formativas que la Policía Nacional va a impartir en la capital altoaragonesa y en Jaca para ofrecer técnicas y herramientas para prevenir las agresiones en el ámbito sanitario. Estas charlas corresponden a unas de las funciones que tiene la figura del Interlocutor Policial Nacional Sanitario.
Los Interlocutores Policiales Sanitarios asesoran a la Administración Sanitaria y a los representantes de los profesionales de la salud en la implantación de medidas preventivas especializadas. Su pretensión no es solo la de erradicar este tipo de agresiones, sino también otras actividades criminales que puedan darse en los centros sanitarios, en estrecha colaboración con la seguridad privada.
A través de exhaustivos análisis de los casos denunciados de agresión, se han elaborado unas sencillas pautas preventivas que ayudarán a estos profesionales a minimizar riesgos en su entorno laboral y a reconducir situaciones violentas, salvaguardando su integridad
Uno de los ejes en la estrategia de prevención de las agresiones es la formación del personal sanitario en la adquisición de hábitos de seguridad y de concienciación sobre la importancia de su denuncia. A través de exhaustivos análisis de los casos denunciados de agresión, se han elaborado unas sencillas pautas preventivas que ayudarán a estos profesionales a minimizar riesgos en su entorno laboral y a reconducir situaciones violentas, salvaguardando su integridad.
Durante estas sesiones se aportan una serie de consejos para afrontar eventuales situaciones violentas, evitar que el profesional se sienta desbordado y minimizar los riesgos de agresión. Entre estos consejos se encuentran configurar un lugar de trabajo con vías de salida abiertas para facilitar la huida, establecer el mobiliario para facilitar la protección del profesional, retirar objetos arrojadizos o tener al alcance las herramientas de petición de auxilio.
También se ofrecen recomendaciones como evitar actuar en solitario con una persona violenta o que presente signos de nerviosismo o agresividad, usar técnicas de contención verbal con un lenguaje moderado, conciliador y con un tono calmado, no continuar una discusión y no enfrentarse a personas que acudan a la consulta armadas.
En caso de producirse una agresión, la Policía Nacional insiste en presentar la denuncia sin demora. La atención será discreta y reservada. "Un delito no denunciado es un delito no conocido por las autoridades y, por tanto, es un delito que no existe. Cuando las agresiones no son denunciadas por profesionales de la salud, quedan silenciadas y sus responsables impunes, propiciándose la reincidencia de estos. Por otra parte, autoridades policiales y sanitarias quedan sin la valiosa información que ofrecen las denuncias, piezas clave en el diseño de estrategias de prevención que podrían evitar futuras agresiones similares", subrayan desde la Policía Nacional, desde donde también se indica que las agresiones verbales pueden ser asimismo denunciadas. "Los insultos y amenazas no denunciadas hoy podrán convertirse en una agresión mañana”, detalla.
Los profesionales de la salud tienen a su disposición un número de teléfono, 091, y un correo electrónico específico ucsp.ipnsadjunto@policia.es del equipo nacional del Interlocutor Policial Sanitario para formular sus consultas sobre agresiones y otros problemas de seguridad.
La figura de Interlocutor Policial Territorial Sanitario se creó en 2017 para tratar de frenar las agresiones a sanitarios, establecer cauces de comunicación con los centros y profesionales sanitarios y detectar puntos débiles en el tema de la seguridad de los trabajadores de la sanidad
Cabe recordar que la figura de Interlocutor Policial Territorial Sanitario se creó en 2017 para tratar de frenar las agresiones a sanitarios, establecer cauces de comunicación con los centros y profesionales sanitarios y detectar puntos débiles en el tema de la seguridad de los trabajadores de la sanidad. Viene recogida en la Instrucción 03/2017 del Ministerio del Interior, sobre “Medidas policiales a adoptar frente a agresiones a profesionales de la salud”. El interlocutor da atención personalizada a los profesionales que sufran violencia o amenazas, les asesora, canaliza sus denuncias y sirve de apoyo e intermediario con el centro.
En Huesca, la Policía Nacional tiene competencias en Huesca capital y en Jaca, mientras que en el resto de la provincia corresponden a la Guardia Civil, con quienes el Colegio de Médicos mantiene conversaciones para retomar charlas presenciales en su demarcación territorial, y llegar así a todos los profesionales de la sanidad.