Se estima que una persona puede inhalar hasta 22 millones de micro y nanoplásticos al año. Así, un estudio publicado por el Centro Internacional sobre la Legislación Ambiental (CIEL, por sus siglas en inglés), ha denunciado el alto nivel que hay de exposición a sustancias tóxicas que representa la inhalación cotidiana de micro y nanoplásticos.
El documento, que lleva el título de 'Respirar plástico: los impactos en la salud de los plásticos invisibles en el aire', revela que la cantidad de micro y nanoplásticos atmosféricos en las cercanías de un individuo puede llegar a 5.700 por metro cúbico y recopila evidencias de los impactos de gran alcance que ello puede tener en la salud.
La cantidad de micro y nanoplásticos atmosféricos en las cercanías de un individuo puede llegar a 5.700 por metro cúbico
Según el responsable de la iniciativa 'Hogar sin tóxicos', Carlos de Prada, "es especialmente preocupante la exposición constante a estas partículas que puede darse en espacios cerrados, tales como los hogares o centros de trabajo, donde se detectan mayores concentraciones que en espacios abiertos, al liberarse poco a poco desde los más diversos artículos que puede haber en interiores".
Tal y como revela el informe de CIEL, se ha documentado la presencia de sustancias químicas tóxicas de los plásticos en el polvo de espacios cerrados, sustancias que están relacionadas con toxicidad reproductiva, alteración endocrina, carcinogenicidad o mutagenicidad. Algunos de estos contaminantes presentes en los micro y nanoplásticos son el bisfenol A (BPA), los éteres de difenilo polibromados (PBDE) y los ftalatos.
Según el informe, los micro y nanoplásticos pueden contener infinidad de sustancias químicas diferentes, afirmando que se habrían identificado más de 10.000 empleadas en los plásticos de las que unas 2.400 al menos podrían ser preocupantes, aunque la toxicidad de muchas otras sustancias posibles no ha sido debidamente evaluada.
Por otro lado, los autores del informe destacan que los tóxicos contenidos en esas partículas vienen a sumarse a otros presentes en el cuerpo humano y que llegan a él a través de otras vías, pudiendo crearse peligrosos efectos combinados que potencien las consecuencias.
Los micro y nanoplásticos son partículas tan pequeñas que generan una polución "invisible" que, a través de los pulmones, pueden pasar a los ganglios linfáticos u otros tejidos y órganos secundarios desde la sangre. El informe los compara con un 'caballo de Troya' en el que se ocultan y transportan sustancias nocivas, como, por ejemplo, "sustancias químicas que alteran las hormonas y relacionadas con la diabetes, la infertilidad y los cánceres hormono dependientes".
Los estudios muestran una serie de efectos adversos a lo largo del tracto respiratorio, que van desde la irritación hasta la aparición de cáncer en casos de exposición crónica
Según detalla el documento, los estudios muestran una serie de efectos adversos a lo largo del tracto respiratorio y más allá, que van desde la irritación hasta la aparición de cáncer en casos de exposición crónica. Los estudios también indican una gama potencial de efectos en el desarrollo de la primera infancia.
Los datos mostrados indican que el problema de la contaminación por plásticos y sus implicaciones va mucho más allá de la contaminación marina y de su presencia en los más diversos ecosistemas terrestres, destacando la relevancia de su difusión a través de la atmósfera, "una ruta de transporte aún más rápida que las corrientes oceánicas, pudiendo trasladarse miles de kilómetros en cuestión de días".