Los pediatras de Atención Primaria son la clave para combatir la obesidad infantil y las enfermedades infecciosas emergentes y reemergentes. Estos han sido los principales temas tratados durante el 19º Congreso de la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap), en el que se dan cita más de 700 profesionales del 2 al 4 de marzo en Madrid.
La obesidad infantil es ya catalogada como la “epidemia del siglo XXI”. Esto se debe a sus elevados datos de incidencia entre niños y adolescentes, que hasta antes de la pandemia se situaban en un 40,6% en España. La previsión de datos para 2023 es de un aumento progresivo, pues durante el Covid-19, “las fases de confinamiento más estrictas, como la necesidad de medidas de distanciamiento y uso obligatorio de mascarillas en muchos ámbitos, incluso al aire libre, contribuyeron a la disminución prácticamente total de actividad física en la población, con un mayor tiempo en casa dedicado generalmente a ocio sedentario y el mayor consumo de alimentos poco saludables ricos en grasas y azúcares ”.
Así lo han asegurado la Dra. María José García Mérida, técnico del Servicio de Promoción de la Salud de la DGSP del Gobierno de Canarias y pediatra del Grupo de Gastroenterología y Nutrición de la AEPap y del grupo de Educación para la Salud de la AEPap y la Dra. Marta Castell Miñana, pediatra del Centro de Salud Campanar-Valencia, y miembro del grupo de Gastroenterología y Nutrición de AEPap y del Comité de Lactancia Materna y Nutrición de AEP.
Las consultas de Pediatría de Atención Primaria juegan un papel fundamental a la hora de prevenir la obesidad infantil
La importancia de este asunto, que ha sido uno de los temas principales que se han tratado durante el 19º Congreso de la AEPap, radica en que el exceso de peso se asocia a problemas de salud a corto plazo en la infancia y a largo plazo en la vida adulta. Por ello, las consultas de Pediatría de Atención Primaria juegan un papel fundamental a la hora de prevenir la obesidad infantil, trabajando de manera conjunta y coordinada con los centros educativos, las propias familias y las instituciones, según apuntan la Dra. Castell Miñana y la Dra García Mérida.
Por otro lado, la pandemia no solo ha agravado esta situación, sino que ha supuesto también un punto de inflexión en las patologías infecciosas. En las atenciones que realiza el servicio de Pediatría de Atención Primaria, preocupan especialmente las enfermedades infecciosas emergentes, que son aquellas provocada por un agente infeccioso recientemente identificado y anteriormente desconocido. Entre ellas se encuentra la Covid-19. Además de esto, preocupan también el sarampión y la tuberculosis, que han reemergido en los últimos años, junto con enfermedades que se encontraban en otras partes del mundo pero que ya han llegado a España, como es el caso de la viruela del mono.
De acuerdo con la Dra. Rosa Albañil Ballesteros, coordinadora del Grupo de Enfermedades Infecciosas de AEPap, las alertas ante las que es necesario estar en guardia en España, debido a la detección de casos en Europa y EEUU desde 2016, son el riesgo asociado a la importación de poliovirus tras la reciente identificación de casos de poliomielitis y la detección de poliovirus en aguas residuales en países de nuestro entorno, meningoencefalitis por el virus del Nilo occidental en España, viruela del mono y de hepatitis no A-E aguda grave de causa desconocida en niños menores de 16 años. A esto se le suman, además, las crecientes resistencias a los antimicrobianos.
Por todo esto, en el Congreso de AEPap, se ha insistido en la importancia de un servicio pediátrico de Atención Primaria que tenga en cuenta esta situaciones y se han recordado las últimas incorporaciones de los calendarios de vacunación de las distintas Comunidades Autónomas, que incluyen la vacuna de la meningitis B y la del virus del papiloma humano en varones.