Los pacientes con cirrosis asociada al alcohol tienen peores resultados después del alta de la UCI, en comparación con los pacientes con cirrosis relacionada con otras causas, según una nueva investigación de la Clínica Mayo (Minnesota, Estados Unidos).
El nuevo estudio, publicado en Mayo Clinic Proceedings, recoge que los pacientes con cirrosis asociada con el alcohol han tenido una tasa de mortalidad hospitalaria posterior a la UCI significativamente más alta (10% frente a 6,5%), así como una mortalidad más alta a los 30 días después del alta de la UCI (18,7% frente a 11,2%) que los pacientes con cirrosis atribuida a otras causas.
"Los resultados clínicos de los pacientes con cirrosis asociada al alcohol se informaron en estudios anteriores, con resultados contradictorios. Nuestro estudio demuestra que aunque no hay una diferencia significativa en la mortalidad de la UCI en pacientes con ALC, en comparación con otras causas, hubo una diferencia significativa en la mortalidad de los pacientes que sobrevivieron a su estancia en la UCI hasta 30 días después", ha comentado el autor principal del estudio, Douglas Simonetto.
Entre los pacientes con cirrosis asociada al alcohol, el 69,2% tenía cirrosis causada por el consumo de alcohol solo y el 30,8% tenía cirrosis debida al alcohol más una causa adicional, como la hepatitis viral C
En total se ha analizado a 1.174 pacientes que ingresaron en la UCI de Mayo Clinic entre enero de 2006 y diciembre de 2015. Los pacientes se dividieron en partes iguales entre aquellos con cirrosis asociada con el alcohol y aquellos con cirrosis relacionada con otras causas. Los investigadores se centraron en las tasas de supervivencia dentro de la UCI, después de la UCI y en el hospital, ya los 30 días después del alta de la UCI.
La edad media de los pacientes del estudio ha sido de 59 años y el 60% eran hombres. Entre los pacientes con cirrosis asociada al alcohol, el 69,2% tenía cirrosis causada por el consumo de alcohol solo y el 30,8% tenía cirrosis debida al alcohol más una causa adicional, como la hepatitis viral C. Aproximadamente la mitad de los pacientes con cirrosis asociada al alcohol continuaron bebiendo hasta el final de la semana, antes de ingresar en el hospital, mientras que el 36,7% abandonó seis meses o más antes del ingreso.
"Sorprendentemente, no hubo una diferencia significativa en la supervivencia de los pacientes que se abstuvieron del consumo de alcohol seis meses o más antes de la admisión en la UCI y los que no lo hicieron. Esto puede reflejar un período de abstinencia demasiado corto, ya que otros estudios han sugerido que se podría necesitar al menos uno a un año y medio de abstinencia para marcar una diferencia significativa en los resultados de supervivencia en pacientes con ALC", ha asegurado el investigador Chansong Choi.