La Organización de Consumidores y Usuarios(OCU) advierte sobre los posibles riesgos para la salud de las pestañas magnéticas, que están empezando a desplazar a las tradicionales pestañas postizas, ya que pueden provocar alergias y orzuelos, entre otras reacciones.
En concreto, estas pestañas no precisan de un pegamento que ralentiza y complica su colocación. Las hay de dos clases: las de tipo sándwich, que se intercalan entre cada línea de pestañas, y las que se colocan sobre un delineador magnético con óxido de hierro, que va a permitir que se adhieran los imanes.
Asimismo, los dos tipos llevan unas pequeñas barras magnéticas a lo largo de la línea de las pestañas. Pese a que la ausencia de pegamentos y la comodidad son "puntos a su favor", según OCU, no están exentas de riesgos, tales como: irritaciones, reacciones alérgicas, infecciones, caída de las pestañas naturales por tracción y orzuelos.
A la hora de quitarlas, si son de tipo sándwich, conviene separarlas suavemente para no arrancar sin querer las pestañas naturales
Por ello, antes de usarlas, OCU recomienda lavarse bien las manos. Y, una vez puestas, estar atento a cualquier irritación o reacción alérgica, en cuyo caso habría que retirarlas inmediatamente.
A la hora de quitarlas, si son de tipo sándwich, conviene separarlas suavemente para no arrancar sin querer las pestañas naturales; si van con delineador magnético, hay que usar un desmaquillador de ojos y dejar que se desprendan de forma natural.
Se trata, en ambos casos, de pestañas reutilizables, por lo que deben lavarse con jabón suave después de cada uso y, además, no deben compartirse. Por otro lado, el delineador magnético, una vez abierto, tiene fecha de caducidad, que suele ser de seis meses.
En cualquier caso, no deben usarse a diario, hay que dejar descansar a las pestañas naturales. Y, si el ojo ya está irritado, no deben usarse; pero tampoco un delineador de ojos o una máscara de pestañas.