Investigadores de la Universidad de Ciencias de la Salud de Arizona (Estados Unidos) han concluido un estudio que puede mejorar el tratamiento del cáncer colorrectal y el melanoma mediante el uso de nanotecnología para administrar la quimioterapia de forma que sea más eficaz contra los tumores agresivos.
Las inmunoterapias ayudan a potenciar la capacidad del sistema inmunitario para combatir las células cancerosas. Los puntos de control inmunitarios son reguladores del sistema inmunitario, que son fundamentales para evitar que el organismo ataque indiscriminadamente a las células sanas. Algunos tipos de cáncer sortean estos puntos de control, lo que permite a las células cancerosas evitar su detección y seguir propagándose. El bloqueo de los puntos de control inmunitarios (BCI) es una terapia más reciente que puede "liberar los frenos" del sistema inmunitario y ayudar al organismo a defenderse.
Las terapias BCI son eficaces para algunos tipos de cáncer, pero no funcionan en todos los pacientes. Por ejemplo, solo el 4% de los pacientes con cáncer colorrectal, la segunda causa de muerte por cáncer en EE.UU., responde a la terapia BCI.
Mediante un método de administración nanotecnológico, los investigadores mejoraron la capacidad de la camptotecina para sinergizar con las terapias BCI, haciéndolas más eficaces
Las investigaciones recientes se han centrado en las formas de mejorar la potencia de las terapias BCI combinándolas con agentes quimioterapéuticos como la camptotecina. Aunque la camptotecina es potente, también es inestable, tiene poca solubilidad en el agua y puede tener efectos secundarios graves para las células sanas.
En este estudio, publicado en la revista 'Nature Nanotechnology', estos científicos estadounidenses han creado la primera plataforma nanoterapéutica de este tipo para superar estos obstáculos. Mediante un método de administración nanotecnológico, los investigadores mejoraron la capacidad de la camptotecina para sinergizar con las terapias BCI, haciéndolas más eficaces contra los tumores agresivos.
"Para conseguir una terapia más eficaz, hemos desarrollado una plataforma nanoterapéutica que puede hacer que los tumores pasen de ser 'inmunes-fríos' a 'inmunes-calientes'. Como resultado, esta plataforma nanoterapéutica fue capaz de aumentar la eficacia de la terapia BCI para erradicar una gran parte de los tumores de cáncer colorrectal en fase inicial y, al mismo tiempo, activar la inmunidad de memoria del organismo, evitando la reaparición del tumor", explica el líder del trabajo, Jianqin Lu.
El equipo unió la camptotecina a la esfingomielina. La combinación de las dos moléculas en una nanovesícula llamada camptothesome estabilizó la camptotecina, mejorando su eficacia y disminuyendo las toxicidades sistémicas
El equipo unió la camptotecina a la esfingomielina, un lípido natural que se encuentra en la superficie de las células. La combinación de las dos moléculas en una nanovesícula llamada camptothesome estabilizó la camptotecina, mejorando su eficacia y disminuyendo las toxicidades sistémicas. El método de administración nanotecnológica también mejoró la captación tumoral del camptothesome en un modelo de roedor, donde penetró profundamente en el tumor con una liberación eficaz de la quimioterapia.
A continuación, el doctor Lu y su equipo idearon una forma de cargar un inhibidor del punto de control inmunitario dirigido a uno de los puntos de control clave, la indoleamina 2,3-dioxigenasa (IDO1), dentro de los camptomas. Cuando se combinó con inhibidores dirigidos a otros puntos de control inmunitarios conocidos como PD-L1 y PD-1, esta estrategia nanoterapéutica eliminó una parte significativa de los tumores de cáncer colorrectal y melanoma metastásicos en fase tardía, clínicamente difíciles de tratar, lo que allanó el camino para nuevos estudios.
Los investigadores señalan que su plataforma nanotecnológica puede utilizarse para administrar una serie de tratamientos contra el cáncer, y que cuenta con una importante ventaja en el proceso de desarrollo de fármacos, ya que se deriva de la esfingomielina, un lípido que ya ha sido aprobado en Estados Unidos.