La presidenta de la Asociación Madrileña de Ayuda e Investigación del Trastorno Límite de la Personalidad (AMAI-TLP), Teresa Oñarte, ha advertido de que están atendiendo "cada vez con mayor frecuencia a personas jóvenes que o tienen ideas suicidas o han intentado acabar con su vida".
"En mi larga experiencia al frente de AMAI-TLP, no había vivido con anterioridad una proliferación semejante de personas muy jóvenes y, sobre todo niños, que llegan a nuestra fundación en busca de consejo, ayuda y tratamiento", ha alertado en un artículo de opinión.
Así, considera cuestión de tiempo que las cifras de suicidio suban en los próximos meses/años: "No me cabe duda de que las estadísticas oficiales recogerán, con el retraso lógico de este tipo de estudios, la tendencia que las organizaciones próximas a la Salud Mental, que trabajamos "a pie de obra", estamos ya constatando en nuestro día a día".
Las ideas suicidas están presentes en "un porcentaje elevado" de las personas que buscan ayuda en AMAI-TLP, algunas en compañía de sus hijos menores o preadolescentes
Oñarte lamenta que las ideas suicidas están presentes en "un porcentaje elevado" de las personas que buscan ayuda en AMAI-TLP, algunas en compañía de sus hijos menores o preadolescentes. "Esta es una novedad que, estadísticamente relevante o no, me sobrecoge", señala.
Las personas que sufren trastorno límite de la personalidad (TLP) tienen una alta tasa de comportamientos autolesivos, intentos suicidas y suicidios consumados. Esto se debe a que una gran mayoría de los diagnosticados tienen un carácter inestable e impulsivo a lo que se le suma una gran comorbilidad, es decir, padecen de manera simultánea dos o más patologías. "Esto les lleva a sentirse incomprendidos y muy perdidos consigo mismos, llegando a tener comportamientos suicidas", explica.
Por todo ello, la experta considera "prioritario" intensificar las políticas públicas de prevención en los niveles educativos iniciales y establecer protocolos de seguimiento para que la asistencia telefónica "no sea el último paso para la asistencia al suicida", aunque "es algo positivo, indudablemente".