Un equipo internacional coliderado desde la U759 CIBERER en el IDIBELL y el Hospital Necker de París (Francia) ha identificado mutaciones del gen SLC35B2 como responsables de un síndrome que, aunque minoritario y desconocido hasta ahora, podría estar afectando a cientos de personas en el mundo sin haber sido diagnosticadas.
Los síntomas de este trastorno incluyen retraso global en el neurodesarrollo, disfuncionalidades motoras y deformación de las articulaciones de la columna vertebral y las caderas. Los investigadores, cuyo trabajo ha sido publicado en la revista Brain, han secuenciado todo el genoma y han analizado los datos con herramientas computacionales.
Además, han demostrado en ensayos en el laboratorio que estas mutaciones dañan la proteína SLC35B2, reforzando así la relación causa-efecto entre la mutación y el trastorno mencionados. En este caso, el gen implicado codifica por una enzima que es una pieza clave en el metabolismo de los proteoglicanos, moléculas esenciales en el desarrollo del cerebro y la mielina, una sustancia vital que recubre las neuronas y permite la correcta conducción de los impulsos eléctricos entre ellas. Y es que, un mal funcionamiento de esta enzima provoca un tipo de leucodistrofia que incluye un grave defecto en la formación de la mielina y también del sistema esquelético.
Las leucodistrofias son enfermedades genéticas raras que afectan al sistema nervioso
"Este hallazgo permitirá identificar muchos más casos de personas con problemas neurológicos y esqueléticos similares, pero que hasta ahora permanecían sin diagnóstico, en ocasiones durante más de 10 años, y también abre la puerta a encontrar un tratamiento para estos pacientes. También aporta luz sobre los elementos necesarios para la formación de la mielina del cerebro, que pueden servir para comprender mejor enfermedades similares y mucho más frecuentes como la esclerosis múltiple", ha dicho la jefa de grupo de la U759 CIBERER e investigadora ICREA, Aurora Pujol.
Las leucodistrofias son enfermedades genéticas raras que afectan al sistema nervioso. Son muy severas y tienen mal pronóstico, con pocas opciones terapéuticas aunque la terapia génica es prometedora en enfermedades como la adrenoleucodistrofia o la leucodistrofia metacromática. Hasta ahora se han identificado más de 150 genes causantes de leucodistrofias.
En los últimos años este grupo ha podido identificar otros nuevos síndromes neurológicos causados por los genes DLG4, UBAP1, PI4KA, PRORP o DEGS1. La estrategia de medicina genómica de precisión para el diagnóstico empleada por el grupo de la doctora Pujol consiste en secuenciar el genoma de los pacientes y desarrollar nuevas herramientas de análisis computacional avanzadas para identificar nuevos genes responsables de enfermedades. Los mejores genes candidatos se confirman encontrando a más pacientes con síntomas y mutaciones similares en bases de datos globales, como por ejemplo GeneMatcher.
Este proyecto ha sido financiado con fondos de la Fundación La Marató de TV3, el proyecto PERIS-URDCat de Medicina Genómica del Departamento de Salud de la Generalitat, la Fundación Hesperia, el Ministerio de Sanidad y el CIBERER, con la colaboración de asociaciones de familias (ELA-España).