Los hospitales públicos de Castilla-La Mancha reciclarán los medios de contraste yodados que se utilizan para el diagnóstico por imagen, lo que podrá suponer reducir 3,5 toneladas al año de yodo, en una iniciativa en colaboración con GE Healthcare.
La directora gerente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM), Regina Leal, ha destacado que esta iniciativa pretende mejorar la sostenibilidad y apoyar la economía circular, "en plena sintonía con la Estrategia de Economía Circular de Castilla-La Mancha".
El yodo es un recurso no renovable con una demanda global anual de más de 30 millones de kilogramos de los que solo se recicla un 18% anualmente
Uno de los productos más utilizados en el ámbito hospitalario son los medios de contraste yodados, utilizados para mejorar la visibilidad de las imágenes que ayudan a diagnosticar para poder establecer un tratamiento preciso en una variedad de enfermedades. Sin embargo, una vez que se extrae la dosis requerida, el producto restante generalmente se desecha.
El yodo, tal y como explica la entidad sanitaria, es un recurso no renovable con una demanda global anual de más de 30 millones de kilogramos de los que solo se recicla un 18% anualmente.
Cuando los contenedores se llenen, los productos desechados se devolverán a sus instalaciones en Lindesnes (Noruega), utilizando las rutas de distribución existentes para reducir la huellamedioambiental.