La Sociedad Española de Radiología Vascular e Intervencionista (SERVEI) advierte de que el 25% de la población española sufre de varices, por lo que recuerdan que es "muy importante" tratarlas, ya que "no es solo un problema estético, sino que puede terminar siendo un importante problema de salud".
Tal y como explican, las varices son una manifestación de la enfermedad venosa crónica. Son dilataciones de las venas, que pierden su función normal de llevar la sangre desde las extremidades hacia el corazón. Con el paso del tiempo, los líquidos se acumulan en las porciones más declives del organismo y se origina edema (la hinchazón de las piernas). "Si las varices se dejan y no se tratan, el problema del acúmulo de líquidos termina provocando trastornos de la piel que favorecen la aparición de úlceras venosas", advierten estos expertos.
Así, los expertos de SERVEI recuerdan que los síntomas habituales son: dolor, hinchazón y pesadez en las piernas, picor, hormigueo, y en casos más avanzados, cambios en la coloración de la piel y úlceras en la pierna y el tobillo que no cicatrizan.
En este sentido, recuerdan que, aunque esta enfermedad se puede manifestar en cualquier persona, hay algunos factores que favorecen la aparición de estas venas dilatadas. En primer lugar, el factor genético, ya que cerca del 90 por ciento de las personas con varices tienen antecedentes familiares. Además, es más prevalente en mujeres que en hombres. La edad es otra de las causas, ya que, con los años, las paredes de las venas tienden a debilitarse. Por otro lado, también es un problema común en las embarazadas, ya que durante la gestación aumenta la cantidad de sangre y presión en las venas. En algunos casos, desaparecen las varices después del embarazo, pero en otros permanecen.
La radiología vascular intervencionista utiliza técnicas mínimamente invasiva para tratar las varices
Asimismo, los cambios hormonales también influyen en la aparición de varices, ya que la menopausia y los anticonceptivos hormonales aumentan el riesgo de aparición de varices. La obesidad también favorece la aparición de esta patología, al producirse un aumento de presión intraabdominal que se transmite a las venas de las piernas empeorando los síntomas. Por último, la vida sedentaria también influye. "Al estar sentado o de pie sin moverse por períodos prolongados de tiempo, dejamos de utilizar la bomba muscular de las piernas favoreciendo el estasis de la sangre en las piernas", explican desde SERVEI.
Por ello, recuerdan la importancia de tratar las varices, al ser un problema que puede afectar de manera significativa a la calidad de vida. Así, "los radiólogos vasculares intervencionistas reúnen un amplio conocimiento clínico de la enfermedad y excelentes habilidades técnicas que permiten ofrecer al paciente las alternativas más modernas y efectivas para el tratamiento de varices con mínima invasión", afirman los expertos de SERVEI.
La radiología vascular intervencionista utiliza técnicas mínimamente invasivas que, además de conseguir óptimos resultados, ofrecen múltiples ventajas, tales como: procedimientos ambulatorios con anestesia local, sin ingreso y con recuperación inmediata; ausencia de dolor y cicatrices; en caso de uso de adhesivo biológico, no hay riesgo de lesiones en la piel ni en los nervios; no hay interferencia con ningún tipo de medicación. Por último, destacan que estas técnicas pueden utilizarse en pacientes de cualquier edad.