España es uno de los cuatro países del mundo que podrían eliminar la hepatitis C en los plazos marcados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), junto con Egipto, Francia e Islandia, según el Observatorio Polaris, que recoge la evolución de todos los países del mundo en el cumplimiento de los objetivos establecidos por la OMS tanto para la eliminación de la hepatitis C como de la hepatitis B.
Según el citado Observatorio, España está muy cerca de alcanzar los objetivos de la OMS relativos a tratamiento (que el 80% de la población tenga acceso al tratamiento) y mortalidad (reducción de un 65%), que, de mantenerse las políticas actuales, se alcanzarían en 2022. Algo más lejos está de los objetivos de incidencia (reducirla en un 90%), que se alcanzaría en 2024 y sobre todo de diagnóstico (reducir a menos del 10% la infección no diagnosticada), que se alcanzarían en 2028. Asimismo, el Observatorio subraya que los progresos no son suficientes en el abordaje del problema entre los usuarios de drogas inyectadas.
España está muy cerca de alcanzar los objetivos de la OMS relativos a tratamiento y mortalidad
De ahí que la Alianza para la Eliminación de las Hepatitis Víricas en España (Aehve), organización que integra a las sociedades científicas y asociaciones de pacientes comprometidas con el objetivo de la eliminación de la hepatitis C, haya pedido a las administraciones sanitarias un esfuerzo suplementario para reforzar las estrategias de cribado y de eliminación en los colectivos más vulnerables, las dos "asignaturas pendientes" para "aprovechar la oportunidad histórica de acabar con este problema de salud pública".
Aehve critica que la estrategia de cribado recientemente publicada por el Ministerio de Sanidad solo incluye a población de riesgo, y relega el cribado en población general a un informe de coste-efectividad solicitado a la Red de Agencias de Evaluación de Tecnologías Sanitarias y Prestaciones del Sistema Nacional de Salud.
España es uno de los cuatro países del mundo que podrían eliminar la hepatitis C en los plazos marcados por la Organización Mundial de la Salud
La Aehve considera, sin embargo, que sin algún tipo de cribado en población general, la eliminación "no se alcanzará o sufrirá al menos un retraso que hará que la factura sanitaria y económica que tenga que pagar el país sea muy superior a la de realizar las pruebas de detección y tratamiento de la hepatitis C". Por ello, demanda para todo el territorio español una estrategia combinada que incluya el cribado en población general y en grupos vulnerables (población de riesgo).
Asimismo, para estos últimos demanda "una estrategia muy específica de eliminación, pues son personas en muchos casos situadas fuera del sistema, que requieren que se les acerque el punto de atención y un trabajo a medida de información, prevención y abordaje de la reinfección".