El Centro Europeo para el Control y la Prevención de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) ha concluido que la mascarilla en exteriores debería restringirse solo a "entornos muy concurridos".
"Para entornos exteriores, cuando el objetivo de salud pública es limitar la transmisión en la comunidad y no es posible el distanciamiento físico, debe considerarse el uso de una mascarilla en entornos muy concurridos", explica el organismo europeo en una revisión científica sobre las mascarillas.
En su documento, apuntan que el uso de una mascarilla "puede ayudar a reducir la propagación de la Covid-19 en la comunidad al reducir la liberación de gotas respiratorias de individuos asintomáticos, presintomáticos o con síntomas leves no específicos".
La revisión sistemática del ECDC de 2021 de la literatura sobre la eficacia de las mascarillas concluyó que había pruebas "de certeza baja a moderada" para el uso de mascarillas médicas, que proporcionan un "efecto protector pequeño a moderado" contra la Covid-19, "tanto en términos de protección personal como de protección de otros". "Los resultados de los estudios publicados después de la revisión sistemática son coherentes con esta conclusión", detalla el ECDC.
En los hogares, mientras tanto, sería aconsejable para las personas con síntomas de Covid-19 o Covid-19 confirmada y para las personas que comparten hogar, "especialmente cuando no es posible aislar a la persona con síntomas o positivo"
Así, con respecto a su uso en interiores, ven recomendable la mascarilla "en espacios públicos cerrados, como tiendas, supermercados, centros de transporte (por ejemplo, puertos, aeropuertos, estaciones de tren/autocar) y en el transporte público".
En los hogares, mientras tanto, sería aconsejable para las personas con síntomas de Covid-19 o Covid-19 confirmada y para las personas que comparten hogar, "especialmente cuando no es posible aislar a la persona con síntomas o positivo".
En los entornos asistenciales, por su parte, recomiendan utilizar mascarillas para proteger a las personas vulnerables, como los ancianos y las personas con enfermedades subyacentes. "En este caso, las mascarillas pueden recomendarse tanto para las personas vulnerables como para las personas que interactúan regularmente con esta población", apostillan.
El organismo europeo recuerda que "en general" las mascarillas FFP2 son "más eficaces" que las quirúrgicas, por lo que las personas vulnerables, incluyendo los ancianos y personas con enfermedades subyacentes, deberían llevar la que ofrezca más protección.
Igualmente, también aconsejan estas mascarillas más efectivas para los positivos o los contactos de alto riesgo de los casos de Covid-19 que no pueden permanecer en aislamiento durante todo el periodo de cuarentena recomendado.