El Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) ha comenzado a trabajar con Eurofins Genomics para intensificar la identificación y seguimiento de mutaciones del genoma del SARS-CoV-2 en Europa.
Los Estados miembros de la Unión Europea están en la fase de aumentar tanto sus capacidades de secuenciación como sus capacidades para establecer un sistema de vigilancia sólido que permita la detección y seguimiento de variantes de virus.
Para respaldar este objetivo, Eurofins Genomics proporcionará capacidad de secuenciación adicional mediante el uso de la tecnología 'ARTIC Next Generation Sequencing' (NGS) con un tiempo de respuesta rápido que incluye servicios bioinformáticos y un volumen de miles de muestras por semana.
El papel principal del ECDC como agencia de la Unión Europea es fortalecer las defensas de Europa contra las enfermedades transmisibles. La creciente diversidad de variantes del SARS-CoV-2 y la potencial mayor infectividad de algunas cepas virales nuevas subrayan la necesidad de identificar, rastrear y rastrear mutaciones en todo el genoma viral. Actualmente, las cepas de preocupación incluyen la variante B.1.1.7, identificada por primera vez en el Reino Unido, y la variante B.1.351, identificada por primera vez en Sudáfrica.
Actualmente, las cepas de preocupación incluyen la variante B.1.1.7, identificada por primera vez en el Reino Unido, y la variante B.1.351, identificada por primera vez en Sudáfrica
Las actividades actuales de análisis de Covid-19 de Eurofins Genomics proporcionan una gran capacidad para apoyar a las autoridades sanitarias de todo el mundo. El soporte puede variar desde el suministro de kits de PCR altamente sensibles (por ejemplo, 'NovaType'), pruebas PCR Covid-19, soluciones de secuenciación de Sanger o secuenciación completa del genoma con NGS para detectar y estudiar variantes de SARS-CoV-2.
Además, también se están estableciendo capacidades a gran escala para las pruebas de anticuerpos, para ayudar a seguir la eficiencia de los programas de vacunación y la resistencia de las poblaciones a la Covid-19. El WGS ha sido aceptado mundialmente como la técnica de subtipificación más precisa para patógenos, siendo una herramienta "extremadamente poderosa" para rastrear infecciones, ya que proporciona información genética "inigualable" sobre las cepas específicas involucradas.