Científicos del Instituto Pasteur (Francia) han liderado un estudio de casos y controles para evaluar la eficacia de las vacunas de ARNm contra las formas sintomáticas de la infección por el SARS-CoV-2, que causa la COVID-19, ya sea el virus original o las variantes Alfa y Beta.
Los resultados muestran que la pauta de vacunación de dos dosis de vacunas de ARNm proporciona un 88% de protección contra el virus original, un 86% contra la variante Alfa y un 77% contra la variante Beta, medida siete días después de la segunda dosis. Los resultados de este estudio se han publicado en la revista The Lancet Regional Health Europe.
En los últimos seis meses, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha clasificado cuatro variantes del SARS-CoV-2 como "preocupantes" porque son más transmisibles o pueden escapar a la respuesta inmunitaria. Se han denominado variantes Alfa, Beta, Gamma y Delta.
A finales de 2020, se notificaron dos nuevas variantes de SARS-CoV-2 en Reino Unido y en Sudáfrica, respectivamente. Esto ocurrió en un momento en el que Reino Unido estaba experimentando un resurgimiento en la incidencia de infecciones. Esto se atribuyó posteriormente a la aparición de la variante Alfa, que ha demostrado una mayor transmisibilidad en comparación con el SARS-CoV-2 original.
Los científicos demostraron que la infección reciente (en los últimos 2 a 6 meses) confiere una protección similar a la observada con las vacunas de ARNm
Por su parte, la variante Beta se notificó por primera vez en Sudáfrica y posteriormente se identificó como portadora de una mutación conocida como E484K y que está asociada a la evasión inmunitaria. La notificación de las primeras variantes del SARS-CoV-2 se produjo cuando empezaban las campañas de vacunación masiva contra el COVID-19 a nivel mundial.
En este estudio se incluyeron 7.288 personas infectadas con la variante original, 31.313 personas infectadas con la variante Alfa, 2.550 personas infectadas con la variante Beta y 3.644 controles no infectados entre febrero y mayo de 2021. No se encontraron diferencias en la eficacia de la vacuna entre las distintas categorías de edad, sexo o exposición profesional.
Otro hallazgo importante del estudio estaba relacionado con la infección previa por el SARS-CoV-2. Los científicos demostraron que la infección reciente (en los últimos 2 a 6 meses) confiere una protección similar a la observada con las vacunas de ARNm.
Los análisis se ampliarán ahora para estimar la eficacia de la vacuna contra la variante Delta, que es la dominante en Francia y en otros muchos países europeos desde principios de julio.