Investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Baylor, en Estados Unidos, han descubierto el circuito cerebral que indica cuándo hay que dejar de comer y que conseguir regularlo permitirá combatir la obesidad, según publican en la revista Sciences Advances.
El equipo de los doctores Qi Wu y Yong Han descubrió un nuevo circuito que conecta un subconjunto único de neuronas productoras de dopamina con las neuronas posteriores del rombencéfalo (parte inferior del tronco cerebral) y que suprime de forma potente la ingesta de alimentos provocando la saciedad en los ratones.
También descubrieron que el medicamento aprobado por la FDA metilfenidato (MPH) produce un notable efecto de pérdida de peso mediante la activación de este circuito concreto, lo que abre la posibilidad de que la regulación de este circuito pueda ayudar a las personas a controlar su peso.
"Muchas personas luchan por controlar el peso, comiendo más de lo que el cuerpo necesita, lo que añade kilos de más que pueden conducir a la obesidad y a un mayor riesgo de padecer afecciones graves como enfermedades cardíacas, derrames cerebrales y diabetes de tipo 2", explica Han, asociado postdoctoral en nutrición pediátrica en el laboratorio de Wu y primer autor de este estudio.
"Esta investigación estudia un circuito del cerebro que ayuda a regular con precisión el tamaño de la porción de comida que se consume"
"Nuestro laboratorio está interesado en mejorar nuestra comprensión de lo que ocurre en el cerebro durante la alimentación con la esperanza de que nuestros hallazgos puedan algún día ayudar a las personas a controlar mejor su peso", añade.
Según explica Wu, profesor asistente de pediatría-nutrición y autor correspondiente del estudio, "esta investigación estudia un circuito del cerebro que ayuda a regular con precisión el tamaño de la porción de comida que se consume. No se trata de cómo se empieza a comer, sino de cómo se termina - precisa -. Se trata de la respuesta de saciedad, que es tan importante como el apetito".
Utilizando varias técnicas avanzadas para estudiar la función neuronal, como el mapeo de circuitos específicos de células, la optogenética y las grabaciones en tiempo real de la actividad cerebral, los investigadores descubrieron un novedoso circuito neuronal que conecta un grupo único de neuronas productoras de dopamina llamado DA-VTA con neuronas de destino posterior conocidas como DRD1-LPBN y que regula el consumo de alimentos en los ratones.
El equipo examinó las actividades de los dos grupos de neuronas mientras los ratones comían. Observaron que la actividad de estas neuronas DA-VTA aumentaba inmediatamente antes de que los animales dejaran de comer.
"Tiene implicaciones para el futuro desarrollo de una medicina de precisión basada en el circuito que pueda ofrecer resultados de reducción de peso con mayor seguridad y eficacia"
Cuando los investigadores inhibieron genéticamente estas neuronas, los animales prolongaron su alimentación, aumentando drásticamente el tamaño de las porciones. Esto sugiere que la inhibición del circuito impidió la respuesta de saciedad. También descubrieron que el aumento de la actividad de las neuronas DRD1-LPBN, que reciben señales de las neuronas DA-VTA, generaba de forma robusta la respuesta de terminación de la comida.
Los investigadores también descubrieron que el nuevo circuito mediaba el efecto de pérdida de peso que se asocia a la toma del fármaco MPH, aprobado para mitigar el trastorno por déficit de atención e hiperactividad.
"Se han propuesto otros circuitos cerebrales para regular la alimentación, pero el que hemos descubierto es el primero que se ha descrito completamente para regular el tamaño de las porciones a través de la señalización de la dopamina - señala Han -. Nuestro nuevo estudio muestra que un circuito que conecta las neuronas que producen dopamina, un mensajero químico previamente conocido por la regulación de la motivación y el placer, tiene un nuevo papel en el control de la alimentación a través de la regulación dinámica de la respuesta de saciedad".
El doctor Wu añade que el hallazgo de que el MPH suprime la alimentación y reduce el peso corporal en ratones de laboratorio mediante el fortalecimiento del nuevo circuito apoyado por la dopamina "sugiere una potencial aplicación de una clase de MPH y derivados para abordar la obesidad. Esto también tiene implicaciones para el futuro desarrollo de una medicina de precisión basada en el circuito que pueda ofrecer resultados de reducción de peso con mayor seguridad y eficacia".