Siempre se ha dicho que beber un vaso de leche caliente a la hora de acostarse favorece un buen descanso nocturno. Hasta ahora, estas propiedades de la leche para conciliar el sueño se le han solido atribuir al triptófano, pero los científicos han descubierto ahora una mezcla de péptidos de la leche, llamada hidrolizado tríptico de caseína (CTH), que alivia el estrés y mejora el sueño.
Según publican en el Journal of Agricultural and Food Chemistry, la revista de la Sociedad Americana de Química (ACS, por sus siglas en inglés), los investigadores han identificado péptidos específicos en el CTH que podrían utilizarse algún día en nuevos remedios naturales para el sueño.
Millones de personas en todo el mundo no consiguen dormir bien y los sedantes, como las benzodiacepinas y el zolpidem, se recetan habitualmente para combatir el insomnio, pero pueden provocar efectos secundarios y la gente puede volverse adicta a ellos. Muchos sedantes actúan activando el receptor GABA, una proteína del cerebro que suprime la señalización nerviosa.
Los científicos también han descubierto varios péptidos naturales, o pequeños trozos de proteínas, que se unen al receptor GABA y tienen efectos ansiolíticos y de mejora del sueño. Por ejemplo, al tratar una proteína de la leche de vaca, llamada caseína, con la enzima digestiva tripsina se produce la mezcla de péptidos que mejoran el sueño conocida como CTH.
Investigadores han descubierto ahora una mezcla de péptidos de la leche, llamada hidrolizado tríptico de caseína (CTH), que alivia el estrés y mejora el sueño
Dentro de esta mezcla, se ha identificado un péptido específico conocido como a-casozepina (a-CZP) que podría ser responsable de algunos de estos efectos. Lin Zheng, Mouming Zhao y sus colegas se preguntaron si podrían encontrar en el CTH otros péptidos, quizá más potentes, para mejorar el sueño.
Los investigadores compararon primero los efectos de la CTH y la a-CZP en pruebas de sueño con ratones, y descubrieron que la CTH mostraba mejores propiedades para mejorar el sueño que la a-CZP sola. Este resultado sugirió que en la CTH existen otros péptidos que promueven el sueño además de la a-CZP.
A continuación, el equipo utilizó la espectrometría de masas para identificar los péptidos bioactivos liberados por la CTH durante la digestión gástrica simulada, y examinó virtualmente estos péptidos para comprobar su unión al receptor GABA y su capacidad para atravesar la barrera hematoencefálica.
Cuando se probaron los candidatos más potentes en ratones, el mejor (llamado YPVEPF) aumentó el número de ratones que se dormían rápidamente en un 25% aproximadamente y la duración del sueño en más de un 400% en comparación con un grupo de control. Además de este prometedor péptido, habría que explorar otros de la HTC que podrían mejorar el sueño a través de otras vías, dicen los investigadores.