El presidente del Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo (CNPT), Andrés Zamorano, ha advertido de que "los costes médicos atribuidos al tabaco son 20 vecessuperiores a la aportación del sector al PIB".
Durante la clausura del XII Congreso del CNPT, celebrado durante las dos últimas semanas con el lema 'Hacia una generación libre de humo, tabaco y nicotina', ha reclamado "voluntad y valentía política" para acabar con la pandemia que es el tabaquismo para la salud pública y que "produce las mismas muertes que la COVID-19".
Al respecto, ha insistido en reclamar al Gobierno "celeridad" para aprobar el Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo 2022-2025 como "germen de la futura Ley de Tabaco", que sea liderado desde la Presidencia del Ejecutivo como una "cuestión de Estado", y que además venga acompañado de la correspondiente dotación económica necesaria para llevarlo a cabo.
El presidente del CNPT ha asegurado que el objetivo en la lucha contra el tabaquismo debe centrarse en conseguir que la prevalencia de consumo "se sitúe por debajo del 10% de la población en 2030". Para ello, considera "imprescindible enfocar la prevención y las medidas disuasorias en los más jóvenes para evitar nuevos fumadores".
Entre esas medidas, se ha refereido a los impuestos que gravan el tabaco, "porque hay margen para hacerlo" y también ha pedido que afecten a los cigarrillos electrónicos.
"Es imprescindible enfocar la prevención y las medidas disuasorias en los más jóvenes para evitar nuevos fumadores"
Pero el tabaco no afecta en exclusiva a los fumadores, con una cifra de mortalidad anual de 60.000 personas en España por enfermedades provocadas o agravadas por el consumo de tabaco, sino que también perjudica a los no fumadores, a través del contacto con el humo ambiental del tabaco.
"La mortalidad atribuida a la exposición al humo ambiental de tabaco es de 1.000 personas al año en España, por lo que deben implantarse políticas que protejan de forma total a la población en espacios cerrados y abiertos", ha detallado.
Por otra parte, durante el congreso Miriam Rodríguez, coordinadora técnica de Proyecto ÉVICT (Evidencia Cannabis Tabaco), ha explicado que "la franja de edad de mayor prevalencia del consumo conjunto de cannabis y tabaco se sitúa en España entre los 15-24 años".
Los enfermeros Vanesa Rodríguez y Juan Riesgo se han referido al abordaje del género en el consumo dual de tabaco y cannabis. "Hablar de un tema con perspectiva de género es hablar del 50% de la población", ha afirmado la primera, mientras que el segundo ha hablado del "doble rechazo" que reciben las mujeres en el consumo de drogas. "Por acercarse a la ilegalidad y por incumplir sus roles tradicionales como mujer", ha lamentado.