La Sección número 1 de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Aragón ha condenado a la Diputación General de Aragón a indemnizar a un hombre con 215.000 euros (180.000 euros de cuantía principal, más 35.000 de intereses) así como a las costas procesales, por las secuelas que padece a raíz no tratarle debidamente una lesión de espalda.
Se trata de un hombre que en el año 2012, con 34 años, inició problemas de espalda y que tras acudir a diferentes consultas en centros de salud y hospitales de la comunidad autónoma, en 2014 tuvo que ser sometido a dos operaciones si bien, finalmente, padece una grave discapacidad, con paraplejia en ambos miembros inferiores, y tiene una incapacidad permanente absoluta.
El paciente padece una grave discapacidad, con paraplejia en ambos miembros inferiores, y tiene una incapacidad permanente absoluta
En la sentencia, el TSJA tiene en especial consideración, entre los informes médicos y periciales aportados, el de un especialista en neurología, según el cuál se deberían haber practicado determinadas pruebas y tratamientos, así como el dictamen acompañado por la demanda, según el cuál éste es un caso "paradigmático" de pérdida de oportunidad, cuando una actuación correcta "habría evitado la discapacidad y la probabilidad de evitar el daño hubiera sido total".
La demanda ha sido tramitada por los Servicios Jurídicos de la Asociación 'El Defensor del Paciente', que ha detallado en una nota de prensa que este hombre fue diagnosticado de una infección, "sin que hubiera ni una sola analítica o prueba médica que la acreditara", cuando en realidad sufría "una compresión de la médula espinal a causa de un tumor", que se detectó tras la primera operación que se le practicó.