El clima más cálido está relacionado con un empeoramiento de los síntomas de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), según una investigación que se va a presenta en el Congreso Internacional de la Sociedad Respiratoria Europea.
El análisis de los datos de 1.177 fumadores y exfumadores con EPOC en Estados Unidos demostró que, aproximadamente dos días después de un aumento de las temperaturas ambientales, se producía un incremento de las exacerbaciones de la EPOC.
El doctor Supaksh Gupta, especialista en cuidados pulmonares y críticos de la Universidad de Washington, explica que descubieron "que cada aumento de un grado celsius en la temperatura ambiente se asociaba a un aumento del 2% en la probabilidad de sufrir exacerbaciones de la EPOC en los dos días siguientes en este grupo de pacientes".
"Este estudio es uno de los pocos que exploran el impacto de la temperatura ambiental en el riesgo de exacerbaciones de la EPOC en un grupo de personas con EPOC establecida de las que tenemos información médica detallada" prosigue. En general, "contribuye al conjunto de conocimientos emergentes sobre la temperatura ambiental y el riesgo de problemas de salud relacionados con la EPOC. Uno de los principales puntos fuertes del estudio es el número de personas incluidas, que viven en varias de las principales ciudades estadounidenses".
"Preocupa que estos problemas se aceleren con la actual crisis climática, que se está agravando"
El experto continúa recordando que "otros estudios han mostrado una conexión entre la exposición al calor extremo y un mayor riesgo de problemas de salud y muerte en personas con EPOC. Preocupa que estos problemas se aceleren con la actual crisis climática, que se está agravando. Por tanto, es importante cuantificar los riesgos para la salud asociados a los cambios en la temperatura ambiente, así como determinar quiénes corren más riesgo para informar a los responsables políticos y a los profesionales sanitarios", recomienda.
El doctor Gupta y sus colegas analizaron a los fumadores actuales y antiguos que se habían inscrito en el Estudio de Subpoblaciones y Medidas de Resultados Inmediatos en la EPOC (SPIROMICS) entre 2010 y 2015, y que habían tenido al menos una exacerbación de la EPOC desde que se unieron al estudio. Evaluaron el riesgo de exacerbaciones de la EPOC basándose en las temperaturas locales y ambientales registradas el día de la exacerbación y en los siete días anteriores.
La edad media de los participantes era de 64 años y el tiempo medio transcurrido hasta la primera exacerbación fue de 603 días (algo más de un año y medio). El riesgo de exacerbaciones aumentó con el incremento de las temperaturas durante los seis días anteriores, y el riesgo más alto se produjo dos días después de la subida de las temperaturas. Los investigadores pudieron ajustar sus resultados para tener en cuenta los niveles de humedad, que se han implicado en el riesgo de exacerbaciones.
"Nuestros resultados plantean la preocupación por el riesgo de que aumenten las exacerbaciones con el cambio climático",resalta. Aunque no es concluyente, "el estudio sugiere que las personas que viven con EPOC pueden querer evitar la exposición a condiciones ambientales adversas y extremas limitando las actividades al aire libre durante los períodos de temperaturas elevadas en relación con las normales".
Además, añade que, "aunque no entra en el ámbito de este trabajo, pero se basa en la bibliografía ya existente, quienes residen en zonas con temperaturas elevadas, o con una mayor variabilidad de las mismas, podrían beneficiarse del acceso a la refrigeración del aire interior".
Los mecanismos que intervienen en la relación entre el calor y las exacerbaciones de la EPOC no se conocen del todo, pero pueden incluir la hiperventilación, que aumenta la posibilidad de un proceso llamado hiperinflación dinámica.
Esto puede dar lugar a respiraciones menos eficientes y eficaces
Durante la hiperinflación dinámica, una persona no exhala completamente antes de empezar a inhalar de nuevo. Esto puede dar lugar a respiraciones menos eficientes y eficaces. En su extremo, la hiperinflación dinámica puede provocar un aumento de la presión en la cavidad torácica y la consiguiente disminución del flujo sanguíneo hacia el corazón.
Los pacientes de edad avanzada también son menos capaces de ajustar su temperatura corporal y mantener una hidratación adecuada. Además, algunos estudios sobre el asma han sugerido que respirar aire caliente y húmedo puede provocar la constricción de las vías respiratorias.
El doctor Gupta explica que "quería contribuir a la investigación de una enfermedad que afecta a la vida de muchos de mis pacientes. Mi objetivo es ayudar a entender la crisis climática actual en los resultados y la utilización de la asistencia sanitaria", continúa. "Espero que nuestra investigación ayude a orientar las recomendaciones de las políticas públicas y a promover directrices de precaución sanitaria para las personas con EPOC durante los periodos de aumento de la temperatura ambiente".
Zorana J. Andersen, que no participó en el estudio, es presidenta del Comité de Medio Ambiente y Salud de la Sociedad Respiratoria Europea y profesora de Epidemiología Ambiental en el Departamento de Salud Pública de la Universidad de Copenhague (Dinamarca). Según ella: "La emergencia climática está demostrando tener efectos de gran alcance en áreas de la vida cotidiana en las que no se esperaría necesariamente que tuviera un impacto. Este estudio ofrece una visión fascinante del modo en que podría estar afectando a la vida de las personas que padecen EPOC y es una prueba más de la necesidad urgente de hacer frente al cambio climático y al aumento de las temperaturas en el mundo".