Un equipo de científicos japonés ha identificado un fármaco antipalúdico, la mefloquina (que, por cierto, es un derivado de la hidrocloroquina), que es eficaz contra el SARS-CoV-2, el virus que causa la COVID-19.
"Para identificar fármacos con una potencia antiviral superior a la de los antivirales existentes, primero examinamos los fármacos antiparasitarios/antiprotozoarios aprobados. Descubrimos que la mefloquina tenía la mayor actividad anti-SARS-CoV-2 entre los compuestos probados. Al probarla frente a otros derivados de la quinolina, como la hidrocloroquina, en una línea celular que imita los entornos celulares de las células pulmonares humanas, descubrimos que era mejor", explica Koichi Watashi, de la Universidad de Ciencias de Tokio y líder de la investigación, que se ha publicado en la revista Frontiers in Microbiology.
El equipo siguió explorando el mecanismo de acción de la mefloquina. "En nuestros ensayos celulares, la mefloquina redujo fácilmente los niveles de ARN viral cuando se aplicó en la fase de entrada del virus, pero no mostró ninguna actividad durante la fijación del virus a la célula. Esto demuestra que la mefloquina es eficaz en la entrada del SARS-CoV-2 en las células después de su fijación en la superficie celular", detalla el Dr. Watashi.
La combinación de fármacos (mefloquina y nelfinavir) mostraba una mayor actividad antiviral que cualquiera de ellos por separado
Así, para reforzar la actividad antiviral de la mefloquina, los científicos estudiaron la posibilidad de combinarla con un fármaco que inhibe la fase de replicación del SARS-CoV-2: el nelfinavir. Curiosamente, observaron que los dos fármacos actuaban en "sinergia" y la combinación de fármacos mostraba una mayor actividad antiviral que cualquiera de ellos por separado, sin ser tóxica para las células de las propias líneas celulares.
Los científicos también modelaron matemáticamente la eficacia de la mefloquina para predecir su posible impacto en el mundo real si se aplicaba para tratar el COVID-19. Lo que predijeron fue que la mefloquina podría reducir la carga viral global de los pacientes afectados a menos del 7% y acortar el "tiempo hasta la eliminación del virus" en 6,1 días.
Por supuesto, este estudio debe ser sucedido por ensayos clínicos, pero el mundo puede esperar que la mefloquina se convierta en un fármaco utilizado para tratar eficazmente a los pacientes con COVID-19.