La Federación de Empleados y Empleadas de los Servicios Públicos de UGT (FeSP-UGT) ha avisado de que el Real Decreto de medidas que permiten a las comunidades autónomas y al Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa) la contratación excepcional de hasta 10.000 profesionales sanitarios para hacer frente a la crisis sanitaria ocasionada por la Covid-19, no va a solucionar el déficit de personal.
A su juicio, la situación actual de falta de profesionales tiene su origen en los límites a la tasa de reposición, hecho que "no corrige" el Real Decreto, así como tampoco el "importante" volumen de empleo temporal que sufre el sector, en torno al 35% de media en España.
"La mayoría lleva años trabajando en una especialidad concreta pero ahora se les puede movilizar a unidades diferentes de las suyas donde deberán desempeñar actividades específicas de una especialidad para la que no se han formado"
"Esta normativa pretende encontrar profesionales que el propio sistema ha mantenido en tierra de nadie, profesionales que no han terminado el lento proceso de convalidación del título de especialista obtenido en países fuera de la UE y profesionales que no han conseguido plaza en el sistema MIR", ha dicho el sindicato, para avisar de que permite contratar profesionales sin especialidad, y movilizar a los profesionales para desarrollar su trabajo en áreas diferentes a las que desempeñan por su especialidad.
Para obtener dicha especialidad han pasado un examen y han dedicado entre 4 y 5 años, en el caso de los médicos, a estudiar un área concreta de los profesionales de la medicina, y dos años en el caso de los profesionales de Enfermería. "La mayoría lleva años trabajando en una especialidad concreta pero ahora se les puede movilizar a unidades diferentes de las suyas donde deberán desempeñar actividades específicas de una especialidad para la que no se han formado", ha avisado.
Además del déficit en las plantillas estructurales, prosigue, mover a estos especialistas va a suponer mayor presión asistencial, que "inevitablemente" repercutirá en la calidad de la asistencia. "Para hacer frente a la segunda oleada, tenemos profesionales cansados física y psicológicamente y con contratos precarios y temporales. Además no han recuperado lo perdido en los recortes del 2012, tanto en derechos como en salario, aunque desde UGT venimos presionando para recuperarlo y aumentar las plantillas estructurales, especialmente en Atención Primaria. Desde FeSP-UGT exigimos más inversión, Recursos Humanos y mejores condiciones laborales", han zanjado.