Al final de la semana 40 de 2022 (que termina el 9 de octubre), el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) ha advertido de que los casos notificados de Covid-19 en la Unión Europea (UE) y el Espacio Económico Europeo (EEE) entre personas de 65 años han aumentado en un 33 por ciento, en comparación con la semana anterior, como parte de una tendencia al alza de tres semanas.
En concreto, se han observado aumentos de uno a seis semanas de duración en 16 de los 25 países que notificaron datos sobre este indicador. Trece países notificaron aumentos en las tasas de notificación globales (para todas las edades). Además, un tercio de los países de la UE/EEE informaron de aumentos en las muertes por COVID-19.
Las previsiones sugieren que estas tendencias se mantendrán en las próximas dos semanas. También se ha observado un aumento de la transmisión y la mortalidad por Covid-19 entre los residentes de los centros de atención de larga duración.
En cambio, no se han notificado cambios significativos en la distribución de las variantes. Además, la aceptación de la vacunación para la segunda dosis de refuerzo sigue estando en niveles subóptimos en los grupos objetivo en muchos países de la UE/EEE.
Las tasas agrupadas de la UE/EEE de ocupación hospitalaria, ocupación en UCI e ingresos en UCI para Covid-19 han aumentado durante las últimas 2-3 semanas. De los 26 países que comunicaron datos, 14 observaron tendencias crecientes de 1 a 5 semanas de duración en al menos un indicador de hospitalización o de UCI. La tasa de mortalidad por Covid-19 agrupada en la UE/EEE se mantuvo en un nivel bajo, similar al de la semana anterior, pero se observaron tendencias crecientes de 1 a 4 semanas de duración en 11 países.
COVID EN ADULTOS DE AVANZADA EDAD
La inmunidad generada por los anticuerpos de la vacuna del SARS - CoV - 2, generalmente duran poco más de medio año. Según un estudio llamado SIREN, desarrollado por investigadores del Public Health England, la mayoría de las personas infectadas por el nuevo coronavirus se recuperan completamente y son inmunes durante unos meses. Los investigadores señalan que la respuesta inmune generada ante la infección puede reducir el riesgo de reinfección en un 83% de los casos durante al menos los siguientes cinco meses. Un resultado que mitiga los temores surgidos ante la aparición de los casos de reinfección.
Sin embargo, los pacientes de edad avanzada (mayores de 65 años) son más propensos a la reinfección por la Covid-19 a pesar de que estos casos sean poco habituales. Mientras que la infección previa ofrecía a los menores de 65 años protección frente al virus, en las personas por encima de esta edad la protección se reduje al 47% lo que indica, según los investigadores del estudio The Lancet, que tendrían mayores posibilidades de reinfección.
El estudio realizado por The Lancet señala que los hallazgos de esta investigación valida las estrategias llevadas a cabo en la mayoría de países para priorizar la protección de las personas mayores. “El análisis también sugiere que las personas que han superado la Covid-19 deben vacunarse ya que no se puede confiar únicamente en la protección natural, especialmente en el caso de los ancianos”, han informado los investigadores.
Los nuevos problemas de salud informados por adultos mayores tras superar la Covid-19, abarca problemas de salud en el corazón, el hígado, los pulmones, los riñones o problemas relacionados con la salud mental.
Un estudio realizado por The British Medical Journal advierte que los nuevos problemas de salud desarrollados tras superar la infección por SARS-CoV-2, son igual de habituales que las secuelas y síntomas persistentes del "covid prolongado". En base al estudio, en el que se analizaron datos de más de 133.000 pacientes estadounidenses mayores de 65 años, los resultados indicaron que las probabilidades de padecer nuevos problemas de salud tras la infección por SARS-CoV-2 eran mayores en hombres, afroamericanos y cualquiera persona por encima de los 75 años de edad.
No obstante, los investigadores añaden que comprender la magnitud del riesgo de las secuelas clínicas más importantes podría mejorar su diagnóstico y el tratamiento de las personas que presentan secuelas después de una infección aguda por SARS-CoV-2.