El Servicio Andaluz de Salud (SAS) y la Fundación Progreso y Salud, entidad dependiente de la Consejería de Salud y Familias, coordinan un proyecto europeo en el que participan 33 entidades de 15 países y que este miércoles se pone en marcha sobre compra pública de innovación en salud.
El proyecto, denominado Procure4Health y dotado con cinco millones de euros del programa Horizonte Europa, tiene por objetivo la creación de una red de compradores de Compra de Innovación en Salud a nivel europeo y de una base de datos consolidada para el intercambio de conocimientos y la puesta en común de las mejores prácticas.
La Junta ha destacado a través de un comunicado que se identificará y priorizará las necesidades comunes para la preparación de proyectos concretos de compra innovadora y el desarrollo de planes de acción en el sector de los servicios de atención sanitaria y social. El trabajo contempla también acciones de formación directa y el desarrollo de un plan común que será adoptado por la Unión Europea.
Procure4Health proporcionará así un entorno "adecuado" para que los compradores públicos y privados, así como la comunidad de servicios de atención sanitaria y social en general, compartan "eficazmente" sus conocimientos, desarrollen las capacidades de los compradores, definan las necesidades comunes y hagan avanzar la Compra de Innovación en la Unión Europea (UE).
La Compra de Innovación es un novedoso abordaje en la contratación que fomenta nuevas oportunidades en el mercado a partir de la identificación de necesidades no cubiertas que requieren del desarrollo de productos y servicios innovadores
La Oficina Técnica de Compra Pública de Innovación del Sistema Sanitario Público de Andalucía (SSPA), creada en el seno de la Fundación Progreso y Salud, apoyará al SAS en la coordinación del proyecto.
COMPRA DE INNOVACIÓN EN SALUD
La Compra de Innovación es un novedoso abordaje en la contratación que fomenta nuevas oportunidades en el mercado a partir de la identificación de necesidades no cubiertas que requieren del desarrollo de productos y servicios innovadores.
Para contextualizar su potencial hay que tener en cuenta que sólo los organismos públicos de la UE gastan cada año alrededor del 14% del PIB en contratación pública. Si a esto se le suma el gasto de las empresas públicas, la cifra se eleva al 19%. Por ello, la Compra de Innovación adquiere una gran importancia para la creación de empleo cualificado y la competitividad de los mercados y sectores dada su magnitud, especialmente en el ámbito de la energía, el transporte, la defensa y la salud.
En la actualidad, se calcula que existen 350.000 poderes adjudicatarios en la Unión Europea que dedican gran parte de sus presupuestos a la contratación de servicios, obras y suministros y dinamizan alrededor de un diez por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) dedicado a la asistencia sanitaria y social. La tendencia al aumento de los costes supone un reto para la sostenibilidad de los sistemas sanitarios.
Siguen existiendo obstáculos para la adopción de la compra innovadora en toda la UE como la fragmentación de los sistemas sanitarios, las diferencias jurídicas o las barreras lingüísticas
En este escenario, aprovechar el uso de las distintas modalidades de Compra de Innovación como, por ejemplo, la compra pública precomercial, la compra pública de tecnología innovadora o la asociación para la innovación, podrían ayudar a hacer frente a las necesidades comunes presentes y futuras y a conseguir la mejor relación calidad-precio, impulsando la innovación desde el lado de la demanda.
No obstante, siguen existiendo obstáculos para la adopción de la compra innovadora en toda la UE como la fragmentación de los sistemas sanitarios, las diferencias jurídicas o las barreras lingüísticas. En este ámbito no existe un conocimiento centralizado a nivel de la Unión Europea, por lo que este proyecto nace para superar esas barreras y crear un marco común para la práctica de Compra de Innovación en las administraciones sanitarias.
En el seno del SSPA, la Compra de Innovación persigue la mejora y sostenibilidad del SAS mediante el desarrollo y posterior incorporación de soluciones innovadoras definidas desde el lado de la demanda, es decir, basadas en las necesidades de los usuarios (finales, intermedios y corporativos), a través de la colaboración con el sector industrial.
En última instancia, la Compra de Innovación repercute en la calidad de la asistencia sanitaria y en la eficiencia y sostenibilidad del sistema sanitario, además de constituir un factor de impulso a la innovación y la creación de empleo y riqueza.