El 75 % de las personas que superan la COVID-19, tras pasar por la UCI, experimentan problemas físicos, mentales y/o cognitivos un año después, según ha revelado un estudio de la Universidad de Radboud (Holanda).
El estudio, que se ha publicado en 'Journal of the American Medical Association' (JAMA), ha analizado a 246 pacientes con el virus SARS-CoV-2 (176 hombres/70 mujeres) que han sido tratados en la UCI en Holanda. La edad media ha sido de 61 años. Mediante cuestionarios, se les ha preguntado cómo les iba un año después de la UCI. A nivel mundial, esta es la primera investigación científica sobre problemas a largo plazo entre los sobrevivientes de la UCI de COVID-19. Los pacientes de este estudio ingresaron en la UCI durante la primera oleada de COVID-19 entre marzo y julio de 2020.
Este estudio muestra que tres cuartas partes de los sobrevivientes de la UCI de COVID-19 experimentan problemas un año después de la UCI
Este estudio muestra que tres cuartas partes de los sobrevivientes de la UCI de COVID-19 experimentan problemas un año después de la UCI. Estos son principalmente problemas físicos, por lo que la mitad de los pacientes experimentan sensación de fatiga. Otros problemas físicos son, por ejemplo, una condición reducida, dolor, debilidad muscular y dificultad para respirar.
Además, los síntomas mentales son comunes. Uno de cada cinco sobrevivientes de la UCI de COVID-19 experimenta sentimientos de ansiedad o estrés postraumático. Además, uno de cada seis tiene problemas cognitivos como problemas de memoria o de atención.demás, los síntomas mentales son comunes; uno de cada cinco sobrevivientes de la UCI de COVID-19 experimenta sentimientos de ansiedad o estrés postraumático. Además, uno de cada seis tiene problemas cognitivos como problemas de memoria o de atención.
"Este estudio muestra el impacto increíble que tiene una admisión en la UCI en la vida de los ex pacientes con COVID-19. Incluso después de un año, la mitad de ellos está cansado o experimenta falta de energía para reanudar su trabajo"
Más de la mitad de los pacientes han reconocido que tienen problemas laborales a causa de sus problemas de salud, por lo que han tenido que reducir su jornada laboral o algunos de ellos siguen de baja o han dejado su labor.
"Este estudio muestra el impacto increíble que tiene una admisión en la UCI en la vida de los ex pacientes con COVID-19. Incluso después de un año, la mitad de ellos está cansado o experimenta falta de energía para reanudar su trabajo", ha asegurado la investigadora principal, Marieke Zegers.