La correcta gestión del Sistema Nacional de Salud (SNS) y la puesta en marcha de políticas sanitarias en esta dirección son fundamentales para que dicho sistema sea sostenible y equitativo. Sobre los cambios que se deben llevar a cabo para modernizarlo y adaptarlo a los nuevos tiempos, ha hablado en una nueva edición de ‘Ciencia para vivir mejor’el exconsejero de Sanidad y presidente de la consultora internacional Know How Advisers, Boi Ruiz.
En palabras de este experto, la sanidad aporta tres grandes elementos al desarrollo social de un país. “En primer lugar, un capital humano sano, que tiene capacidad creativa y productiva, lo que le convierte en un valor indispensable para cualquier economía”. En segundo lugar, “disponer de un sistema como el nuestro donde no hay que temer la enfermedad desde el punto de vista económico es un gran elemento de cohesión”. Por último, Ruiz destaca que la salud es ciencia y la ciencia es progreso y esta última al servicio de la salud “es más progreso”, añade.
En esta línea, Boi Ruiz también ha destacado el concepto de que la sanidad no es un gasto, aunque “se contabiliza como se contabiliza”, puntualiza. Ante este escenario, explica de qué manera se debería pasar de esa idea de gasto a una de inversión en salud.
Para ello, este experto lo tiene claro: “Debería haber un marco regulador diferente, que permitiera, en el caso por ejemplo de la Sanidad, no trabajar con presupuestos anuales, sino plurianuales”.
“Debería haber un marco regulador diferente para que Sanidad trabajara con presupuestos plurianuales”
Además, insiste en que el gran problema del SNS es que pese a haberse hecho una excelente ley, la Ley General de Sanidad de Ernest Lluch, no se dotó de reglamento, por lo que el actual sigue siendo el de la Seguridad Social. “Por ejemplo, todavía seguimos costeando el medicamento con criterio de ser activos o ser pasivos”, apunta.
También por esta falta de reglamento, ámbitos como la salud pública y mental “son las cenicientas del SNS desde el punto de vista de la financiación”.
En definitiva, señala Ruiz, “Sanidad es un poco el ministerio de la antigua Seguridad Social para la cobertura de la enfermedad común. El resto, como por ejemplo, funcionarios del Estado y seguros obligatorios, no están recogidos”, concluye.