‘Environmental’, el primer eslabón del enfoque ESG por el que apuesta el sector salud

La toma de decisiones de muchas compañías tiene como centro un enfoque ESG, cuyos criterios se basan en factores ambientales, sociales y de gobierno corporativo

Conservación ambiental. (Foto: Freepik)
Conservación ambiental. (Foto: Freepik)
CS
19 diciembre 2023 | 14:40 h
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Environmental, Social y Governance. Estas son las palabras que dan forma al término ESG, una estrategia que se ha convertido en la hoja de ruta de grandes compañías, entre ellas las vinculadas con el sector de la salud.

Detrás de este concepto se encuentran muchas de las decisiones que desde las corporaciones se toman en relación a su compromiso con el medioambiente, con los derechos humanos y cuidados de la sociedad, y con la transparencia, entre otras cuestiones.

Por orden, y en línea con la primera inicial, ‘Environmental’ (E), este factor engloba el efecto que la actividad de las empresas tiene en el medioambiente, bien sea de forma directa o indirecta.

De este modo, estos criterios analizan la contribución y el desempeño de un negocio respecto a los desafíos ambientales, como las emisiones de gases de efecto invernadero, la protección de la biodiversidad, los recursos hídricos o la deforestación. A través de métricas se evalúan dichos impactos por parte de las empresas y sus esfuerzos para reducirlos.

El factor 'Environmental' engloba el efecto que la actividad de las empresas tiene en el medioambiente

Según señalan los expertos, no sólo es una cuestión de mitigar efectos negativos, sino de generar también un impacto positivo directo.

Actualmente, el riesgo ambiental se ha convertido en un factor que está muy marcado en la inversión de las compañías. De hecho, desde las direcciones se toman decisiones en función de cómo afectan las actividades de las empresas en el medioambiente.

¿Y cuáles son esas principales actuaciones con el criterio ‘Environmental’ como estandarte?

Los analistas en ESG destacan siete: un uso responsable de los recursos hídricos; el fomento de la economía circular, el consumo de materiales y la gestión de residuos; la adaptación del negocio a las consecuencias del cambio climático; la mitigación del cambio climático; la optimización del consumo energético y fomento del uso de energías renovables; la prevención de la contaminación (lumínica, derrames, vertidos) y emisiones contaminantes de sustancias químicas y partículas en la atmósfera, y la protección de la biodiversidad y espacios naturales.

Más allá del reporte que supone para las compañías y para el planeta en general el criterio ‘Environmental’, junto a ‘Social’ y ‘Governance’ constituyen una “filosofía” que provoca importantes cambios positivos. “Los criterios ESG son uno de los factores más valorados por los inversores, más allá de los resultados financieros”, señalan los expertos. Además, mejoran la reputación, reducen riesgos e implementan el acceso a nuevas fuentes de financiación.

Así, las compañías del sector salud ponen cada vez más el foco en esta estrategia, que no solo se ha convertido en un reto de futuro, sino en una realidad que se materializa con planes de ESG propios y personalizados.

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.
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