El Servicio de Alergología del Hospital General Universitario Gregorio Marañón, cuyo máximo representante del centro es Joseba Andoni Barroeta, ha realizado un estudio entre el personal sanitario del centro con antecedentes de enfermedades alérgicas graves para conocer la seguridad de las vacunas de mRNA frente al virus SARS-CoV-2. Son profesionales con antecedentes de anafilaxia, asma grave, urticaria/angioedema grave o síndrome de activación mastocitaria. Una de las conclusiones más importantes de este estudio prospectivo es que tan solo el 1,6 % de los pacientes presentaron pruebas cutáneas positivas a las vacunas o a los componentes de las mismas, y no fueron vacunados en previsión de una reacción alérgica sistémica grave.