El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid, cuyo presidente es Ángel Garrido, ha autorizado este martes la compra centralizada por el Servicio Madrileño de Salud (Sermas) de los nuevos sistemas de control de glucosa para pacientes diabéticos tipo 1, por un importe anual de casi 22 millones de euros. Los dispositivos consisten en un sensor que va insertado bajo la piel que mide de forma permanente la glucosa. Las lecturas de los niveles se realizan mediante un aparato externo con solo acercarlo al sensor. Este avance evita en gran medida los pinchazos continuos para medir mediante tiras reactivas el azúcar en sangre.